El nacimiento de tres crías de halcón peregrino en perfecto estado hace 17 días en la 'caja nido' situada en la torre del Museo de América de Madrid, en el distrito de Moncloa-Aravaca, ha sorprendido a los ecologistas y a la Sociedad Española de Ornitología SEO/BirdLife. Las tres crías, un macho y dos hembras bautizadas como Beltrán, Berta y Virtudes, se suman a las tres parejas que viven en la capital y a las otras 30 distribuidas por toda la región.
Según ha explicado el director de Marketing de la Sociedad Española de Ornitología SEO/BirdLife, Fernando Barrio, este lunes se ha procedido a la colocación de dos anillas de identificación y seguimiento a cada una de las crías, de entre 400 y 500 gramos. Una de las anillas, grabada con grandes números, servirá para hacer el seguimiento a distancia con catalejo del animal, y la otra le identificará si es capturado o fallece. Barrio ha declarado que las crías comenzarán a volar dentro de 30 días, seguirán durmiendo en el nido durante 3 ó 4 semanas y después se irán a otra zona, "lo más seguro que de la Comunidad", donde encuentren una mayor cantidad de alimento y donde puedan reproducirse, "ya que los padres en ese momento los echarán, porque son muy territoriales".
Los padres de las crías llegaron de manera natural a la zona de Moncloa hace dos años, sin que los miembros de SEO consiguieran localizar el nido. Por ello, el pasado día 5 de marzo decidieron situar unas 'cajas nido' con un diseño apropiado en diferentes puntos de la torre del museo "y por suerte ocuparon uno". En los últimos cinco años esta especie ha sufrido un descenso importante en el número de ejemplares. "Estaban contabilizadas unas 40 parejas en la región y ahora no crían más que 30", ha indivado Barrio. Los animales más afectados por la mortandad son las parejas del suroeste de la región, donde crían sólo 10 de las 20 contabilizadas.
Por su parte, los halcones de la sierra son los que tienen menos problemas, mientras que en la ciudad de Madrid, de las 3 parejas que hay, una todavía no se ha reproducido, otra cría de manera esporádica y la recién parida es la primera vez que lo hace. Según ha informado Barrio, la disminución de esta especie en la región se debe a la ingesta por parte de las presas de productos químicos utilizados en la agricultura intensiva, que se van acumulando en los organismos de los halcones y les crean problemas de fertilidad, así como al aumento de la población de competidores como el búho real. En toda España existen cerca de 2.500 parejas de este tipo de halcones.
"Es una especie que no se encuentra amenazada a nivel nacional a pesar de que su mayor inconveniente siempre ha sido el mercado de cetrería para el cual, sobre todo antes, se les robaban los huevos", ha manifestado Barrio. Por su parte, Elena Delgado del departamento de Difusión del Museo, ha explicado que los nombres fueron elegidos por los niños que acudieron a la feria de Las Américas que se celebró en la Casa de Campo. "Entre otras cosas, se ofrecieron talleres a los niños y se les incitó a que propusieran nombres. Como el halcón es una especie fuerte, necesitaban unos nombres contundentes".
El halcón peregrino está clasificado como vulnerable en el Catálogo de Especies Amenazadas de la Comunidad. Los adultos alcanzan los 40 ó 45 centímetros de altura; destacan por su amplio pecho; alas anchas y afiladas, y cola relativamente corta. Suelen vivir en acantilados rocosos, en especial yesíferos, por sus diferentes oquedades, ángulos y aristas que ofrecen buenas atalayas para controlar y lanzarse sobre sus presas, entre las cuales se hallan como favoritas las palomas, tórtolas y estorninos.