Brito falleció el lunes por la noche en el Hospital Militar de Caracas, donde llevaba varios meses internado debido al deterioro físico sufrido por las sucesivas huelgas de hambre que comenzó en 2003 para reivindicar la propiedad de una hacienda en el oriente del país.
Solórzano afirmó que "a pesar de los continuos llamados públicos y privados al propio Jefe de Estado (Hugo Chávez), el Ejecutivo nunca dio respuesta a las legítimas exigencias de Franklin Brito".
Según la representante de la MUD, "no tuvo oportunidad de ser escuchado por un juez imparcial e independiente, que pusiera coto a la injusticia e hiciera valer sus derechos" y la Defensora del Pueblo "solo prestó atención al caso, para acusarlo de no tener la mejor situación mental".