Así, el Tesoro ha logrado su objetivo de recaudar 3.500 millones de euros en bonos a tres años y, además, a un coste menor que en la última subasta. Esta vez, la rentabilidad para los inversores se ha quedado en el 2,306%, frente al 3,394% obtenido en junio, según datos del mercado.
Además, la demanda de bonos ha duplicado el objetivo máximo previsto, con 6.625 millones de solicitudes. En la anterior puja de bonos a tres años, que tuvo lugar el pasado 10 de junio, se saldó con la colocación de 3.903,21 millones de euros con un interés marginal del 3,394%, la mayor rentabilidad desde octubre de 2008.