El presidente alemán, Christian Wulff, asistirá tanto al partido por el tercer puesto del Mundial de fútbol de Sudáfrica 2010, que disputarán Alemania y Uruguay, en Port Elizabeth, como a la final entre España y Holanda del domingo, en Johannesburgo.
Así lo anunciaron fuentes de presidencia, según las cuales Wulff, correligionario de la canciller Angela Merkel elegido el pasado 30 de junio, ha felicitado a la selección de Joachim Löw y expresado su convicción de que se alzará campeona del Mundo en 2014, en Brasil.
Con su asistencia a la "pequeña final" -la lucha por el tercer puesto- Wulff quiere hacer "una reverencia a este joven y fantástico equipo y al anfitrión sudafricano por su magnífico Mundial", indicaron esas fuentes.
La propia Merkel, quien asistió desde el graderío a la victoria de la selección alemana en cuartos de final contra Argentina y luego conversó en vestuarios con los jugadores, felicitó esta vez por teléfono a Löw por el rendimiento de su joven selección.
Alemania ha encajado en general con deportividad la derrota ante "la mejor selección del mundo", como admitió ayer Löw, y se ha rendido a la superioridad de los españoles, tal como hizo en la final de la Eurocopa 2008, en la que ''La Roja'' se impuso por el mismo resultado 0-1, entonces con gol de Fernando Torres.