En ese mitin celebrado en el barrio madrileño de San Blas, Bermejo añadió que tanto Jiménez Villarejo como él, y el propio Simancas, eran "molestos" para los dirigentes populares.
Por otro lado, el ministro de Trabajo, Jesús Caldera, afirmó en Avilés que "el único argumento" del PP es "la furia y la crispación". Además, aseguró que el Gobierno seguirá aumentado las pensiones mínimas por encima de la inflación.
El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, pidió el voto a los coruñeses para conseguir "una mayoría" que permita gobernar "sin crispación ni hipotecas".
Mientras, el candidato del PSOE a la Junta de Castilla-La Mancha, José María Barreda, dijo que en Murcia hay nervios por poner en la agenda de la política nacional el problema del agua. "No soy un fundamentalista ni un talibán", continuó, pero hasta ahora, parecía que el agua era "de todos, menos nuestra".