En un Estado de Derecho, el juez ordena y la Policía detiene. Pero, ¿cómo se llama cuando la Policía detiene a alguien en una causa judicial sin que lo ordene el juez?
[En este punto hago un inciso:
'Sturmtruppen' era el nombre que recibían las más altas tropas de asalto de
Hitler].
En el caso de
José Joaquín Ripoll, el presidente popular de la Diputación de Alicante, la Unidad contra la Delincuencia Especializada y Fiscal (UDEF) Central, la Comisaría General de Policía Judicial y la Brigada Provincial de Policía Judicial de Alicante, apoyados con Unidades de Intervención Policial y del Grupo Operativo de Intervenciones Técnicas (GOIT), han actuado como una auténtica
'Sturmtruppen' a lo 'Bonvi'.
[En este punto hago otro inciso:
'Sturmtruppen' fue una serie de cómics de los años 70-80 creados por
Franco Bonvicini 'Bonvi', un genio creador de muchas otras tiras cómicas, que ideó una serie de humor sobre un tema tan importante y trascendental como fue la Segunda Guerra Mundial, basada en la propia
Sturmtruppen, una de las mas altas tropas de asalto de Hitler. Ni que decir tiene, claro, que los
sturmtruppen de 'Bonvi', no eran sino una parodia ridícula de tan fieros guerreros nazis, ciegos seguidores de su fanático líder].
Para los anales de la Justicia quedará cómo Ripoll, cuya inocencia sobre su presunta corrupción ignoro -ahora se habla así de enrevesado-,
fue detenido por la Policía arriba citada con publicidad y alevosía y sin orden judicial. Y para esos anales quedará cómo unas brigadas policiales a lo
sturmtruppen han obligado a un juez y a un Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana a hacer público un insólito comunicado
cuya lectura es recomendable. Si no fuera porque es dramático y a cualquiera le pueden asaltar, seguro que
Samperi rodaría una nueva
Sturmtruppen sobre el muy español Ministerio del Interior.
[En este punto hago el último inciso:
'Sturmtruppen, jo… que guerra' fue una hilarante película dirigida en 1976 por
Salvatore Samperi a partir de los cómics de 'Bonvi'. Nos reímos entonces con la ocurrencia. Lo que sucede es que la Gestapo fue real].