Presidente Evo Morales hizo el anuncio formal
Bolivia compró dos refinerías brasileñas
sábado 12 de mayo de 2007, 17:49h
Después de una larga y difícil negociación, el Gobierno logró recuperar las refinerías Gualberto Villarroel de Cochabamba y Guillermo Elder Bell de Santa Cruz. Para ello, aceptó la última propuesta de Petrobras y cerró un acuerdo para la recompra por 112 millones de dólares de las dos plantas. El anuncio lo realizó el presidente Evo Morales en el Palacio de Gobierno.
Morales dijo que “Bolivia marca una nueva historia en el proceso de recuperación de los recursos naturales y de algunas empresas estatales, que fueron subastadas y vendidas a las empresas extranjeras”.
“Las refinerías de Cochabamba y Santa Cruz vuelven a manos del Estado boliviano”, subrayó el gobernante. Transcurrido un año y nueve días del decreto de nacionalización de los hidrocarburos, el Gobierno recuperó las dos plantas de refinerías no sin antes pasar por diferentes obstáculos en la negociación. Incluso se dieron situaciones de distanciamiento en las relaciones con Brasil y el enfado del presidente Luiz Inácio Lula da Silva por el “discurso radical” del mandatario boliviano.
En 1999, durante el gobierno del presidente Hugo Banzer, Petrobras se adjudicó las dos refinerías, por las que pagó 104 millones de dólares. Ambas plantas procesan diariamente 40.040 barriles de petróleo.
Durante la negociación, Petrobras inicialmente pidió cerca de 200 millones de dólares por ambas unidades de producción. Posteriormente bajó a 153 millones, luego a 135 millones y finalmente la vendió en 112 millones de dólares, explicó el Presidente al recordar que en su encuentro con Lula en la Isla Margarita, Venezuela, se consiguió que la empresa acepte vender el ciento por ciento de las refinerías.
En su discurso, Morales aclaró que “el Gobierno respeta y respetará la propiedad privada nacional e internacional. (…) Una cosa son los recursos naturales de propiedad del Estado y otra la propiedad que obtiene un boliviano, un país o una empresa”.
Tras el logro obtenido, el Presidente indicó que se empezará de inmediato a realizar el contrato de compra y venta con la empresa brasileña.
La refinería Gualberto Villarroel produjo 23.638 barriles por día durante el 2006 y la Guillermo Elder 16.292. Estas plantas producen gasolinas, diesel oil, jet fuel, aceites y grasas, entre otros.
Por su parte, el ministro de Hidrocarburos, Carlos Villegas, expresó que el pago se hará en dos fases y que el financiamiento saldrá de la exportación del crudo reconstituido de dos años, por lo que ni YPFB ni el Tesoro General de la Nación pondrán el dinero.
“Hemos logrado un plan de pagos de corto plazo, vamos a pagar el 50% a la suscripción del contrato y el otro 50% a los dos meses después de dicha suscripción”, señaló el funcionario”.
El presidente Morales manifestó también que se respetarán los empleos de ambas refinerías y que se empezará a invertir para mejorar y ampliar la capacidad de las mismas, asegurando el abastecimiento de combustibles para el mercado interno.
El ministro Villegas complementó que también se mantendrá la actual escala salarial y que se cambiará sólo a cuatro empleados brasileños, que ahora ocupan puestos de gerencia. En este marco, Evo Morales sostuvo que “la lucha de los movimientos sociales no fue en vano”. Recordó que algún momento se pensó en instalar nuevas refinerías, “pero nos dimos cuenta que era más económico recuperarlas e invertir en ellas”.
El ministro de Minas y Energía de Brasil, Silas Rondeau, aseguró que durante la transición del control de las refinerías Guillermo Elder y Gualberto Villarroel, Petrobras brindará el apoyo técnico a YPFB.
También dijo que se conformará una comisión para que coordine las acciones de transición con técnicos de la estatal petrolera boliviana.
Indicó que con la compra de ambas plantas, Bolivia, asimismo, heredó los contratos de exportación de derivados. “Ellos heredan los contratos, los derechos y obligaciones”, aseveró en declaraciones recogidas por la Agencia Estado y reproducidas por la gubernamental ABI.
Rondeau sostuvo que comercialmente, la producción de ambas unidades no representaba un peso expresivo en los resultados de Petrobras. Añadió que el 95% de los trabajadores son bolivianos, cuya permanencia en la empresa fue garantizada por el presidente Evo Morales.
Las proyecciones señalan que en el período 2008-2012, el Estado boliviano tendrá unos ingresos adicionales de 74,6 millones de dólares.