El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, recalcó hoy que no existe "ninguna fisura" en el seno de los partidos que conforman el Gobierno de Cantabria en cuanto a la reclamación sobre la llegada de la línea de alta velocidad de Madrid por Palencia a la comunidad, si bien admitió que hay diferencias en el modo de reivindicar entre PRC y PSOE.
Revilla se pronunció así en el Pleno del Parlamento en una interpelación que le hizo el presidente del Partido Popular, Ignacio Diego, quien le acusó de intentar distanciarse de José Luis Rodríguez Zapatero al ver que "se está hundiendo" y el líder regionalista "no quiere hundirse con él".
En respuesta, el presidente del Ejecutivo cántabro reprochó a Diego que no apoyara la moción para reivindicar el AVE que previamente habían defendido los regionalistas, y que, según dijo, había sido redactada "a la carta" para contar con el apoyo de la oposición.
En opinión de Revilla, en la sesión de hoy salió el "auténtico espíritu" del PP, que "está deseando" que no se haga el AVE "para obtener rédito".
Y consideró, frente a las argumentaciones socialistas, que la alta velocidad es "fundamental" para el desarrollo económico de Cantabria y su "estrategia de futuro".
Revilla se mostró "razonable" ante la situación económica, dijo que está "en compás de espera" ante la reunión con Zapatero y reprochó al ministro de Fomento, José Blanco, que ha "metido la pata", además de recordarle que fue él quien ofreció a Cantabria disponer de dos conexiones, incluyendo la de Bilbao.
Frente a esto, Diego le reprochó que haya tardado seis años en "darse cuenta de lo importante que es el AVE para Cantabria", y opinó que en realidad, Revilla "aparenta" y "representa teatralmente" una "fuerza", identificándole con el presidente del Gobierno central.
"Usted y Zapatero", que dijo que van "de la mano" y "están unidos por el fracaso del AVE", han "perdido la credibilidad", aseveró Diego, que les comparó con los directores de un circo que "se les va de las manos".