Además, Freenox tiene un impacto medioambiental mínimo, ya que reduce el consumo de combustible un 30%. El nuevo motor rebaja también el ruido percibido, y la contaminación acústica, en un 50%, según informó la Conselleria de Innovación, Universidades y Empresa de la Generalitat desde China cuyo responsable, Josep Huguet, se ha desplazado junto con 50 empresas catalanas para consolidar acuerdos comerciales.
Uno de los motivos del bajo impacto medioambiental es la reducción de hasta un 80%, respecto de los motores actuales, de emisiones de NOx -un óxido nitroso que al ser liberado al aire por combustión genera contaminantes-. Estas mejores se sitúan en la línea de exigencias de medioambientales que entrarán en vigor en 2020.
Los responsables del proyecto, del que forman parte las empresas Futur Investment Partners, SA-FIPSA y Hoffman Innovation Iberica, han mantenido estos días reuniones con los responsables chinos de la Avic Commercial Aircraft Engine Co Ltd (ACAE), y han establecido contactos con las autoridades gubernamentales del sector aeronáutico de China.