Nacido en Torrelavega, San Emeterio logró numerosos triunfos, entre los que destacan los conseguidos en el Circuito Montañés, la Subida al Naranco, el Gran Premio Primavera, o el tercer puesto alcanzado en la Vuelta a Levante.
Su mayor triunfo lo logró en 1959, con una etapa en la Vuelta a España. Y ese mismo año contribuyó al éxito de Bahamontes en el Tour de Francia. El corredor cántabro también participó en el Giro, en el año 1962, y quedó en el puesto 22.
Tras dejar la competición, nunca se desligó de este deporte. Así, destaca su etapa al frente de la selección cántabra de ciclismo y también fue director deportivo en equipos como Karpy, Monteverde, y sobre todo el Teka de Cantabria, equipo al que estuvo vinculado desde el año 1976 hasta 1990.