En la sede socialista federal, en la calle Ferraz, se valora muy positivamente la posibilidad de reservar al secretario general de UGT-Madrid un puesto de salida en la lista autonómica, o incluso a la Alcaldía madrileña, para medirse con Ruiz-Gallardón en un cuerpo a cuerpo extremadamente “feroz”, según las fuentes consultadas por Diariocrítico.
Esta corriente, la más beligerante de Ferraz, ya podría habérselo trasladado a la propia secretaria de Organización, Leire Pajín, y al vicesecretario general y ministro de Fomento, José Blanco. Aunque, eso sí, informalmente y por separado.
Según nuestras fuentes, Blanco no vería con malos ojos la incorporación del ugetista José Ricardo Martinez, e, incluso, de Javier López, actual secretario general de CCOO de Madrid, o del dirigente confederal de Comisiones Rodolfo Benito a la lista socialista, siempre con la idea de cerrar unas candidaturas de amplio espectro de la izquierda.
Ante la falta de “relumbrones” o “paracaidistas" al uso, el ministro de Fomento podría así apuntalar la idea de Zapatero de mantener a Tomás Gómez, como ha comprometido en público tantas veces, pero intentando formar un equipo más “duro”, con capacidad para librar la difícil batalla de 2011, en la que se prevé una lucha encarnizada para la que los sindicalistas siempre han demostrado gran preparación. “Una campaña sucia y marrullera se espera”, según apuntaba esta fuente; una lucha en la que saldrán trapos sucios de uno y otro lado casi a diario.
Blanco sabe del desgaste del gobierno regional, y también del escaso tirón electoral de los presuntos candidatos socialistas, de la posible incorporación de la UpyD de Rosa Diez al escenario autonómico o de la presumible salida de Ruiz-Gallardón hacia un hipotético Gobierno de Rajoy -si éste venciera en las elecciones generales-, lo que movería el tablero con facilidad. Encajando piezas, todo son especulaciones aún en el cuento de la lechera socialista, pero la preocupación por recuperar Madrid se acentúa y es difícil que ZP pueda dejar pasar el verano sin un gesto claro en un sentido o en otro.
Los sindicatos han mantenido ya múltiples contactos informales a varias bandas y al más alto nivel y la consigna parece hacerse cada vez más clara: evitar a toda costa que Esperanza Aguirre y Gallardón repitan en sus cargos. En el PP saben que el movimiento de los últimos días en el PSM y en Ferraz de aproximarse a la UGT, y también a CCOO, para dar forma a una candidatura algo más escorada a la izquierda puede ser un arma de doble filo para el PSOE, pero también para el PP, que no atraviesa su mejor momento de forma.
Una pista más, el secretario general de IGT, Cándido Méndez, y Rodriguez Zapatero se verán en breve y hablarán también de Madrid. Blanco y en botella.