Alonso reventó el motor de su Ferrari

Fernando Alonso reventó el motor de su Ferrari a dos vueltas de conquistar un noveno puesto en Malasia y dos puntos que lo hubieran mantenido como líder del Mundial.

Fue al intentar realizar un adelantamiento a Jenson Button en el final de recta y a la salida, el Ferrari comenzó a echar humo. Vettel ganó la carrera y, ante la retirada de Alonso, Massa es el nuevo líder del Mundial, con dos puntos de ventaja sobre el español.

La remontada de Alonso se cerró con un inesperado hecho. Salió el 19 y alcanzó lo previsto, los puestos que rondaban del ocho al diez. Pero en el último suspiro, cuando ya la carrera languidecía, Alonso intentó una vuelta de tuerca. Pasar a Button, que iba más lento. La maniobra desembocó en un resultado nefasto: la rotura del Ferrari.

El tradicional contratiempo de Sebatián Vettel no llegó esta vez. No hubo lluvia ni muchos cambios de posición. Y el alemán, que salía tercero en la parrilla, conquistó su primera victoria de la temporada de principio a fin. Superó a Webber en el viraje inicial y así, hasta el final. No hubo motores quebrados ni bujías, ni nada.

Por su parte, Michael Schumacher sólo completó diez vueltas antes de que saltara una tuerca de la rueda trasera izquierda de su Mercedes y lo obligase al abandono.

Alonso declaró al final de la prueba que había sido la carrera más difícil de su vida. "La salida fue mal, en la vuelta de formación se me rompió el cambio y me quedé sin embrague. Desde entonces tuve que frenar de forma extraña, primero tenía que bajar marchas y luego acelerar. Ha sido la carrera más difícil de mi vida porque he tenido que improvisar".

Dijo que: "en la rotura del motor no creo que haya influido nada el problema del cambio, el problema ya sucedió en la vuelta de formación y no tenía ningún tipo de freno motor, ese mi gran problema en las curvas, frenaba, elegía la marcha que quería para esa curva y luego daba un acelerón para que entrara esa marcha y conducir así durante 54 vueltas era casi imposible".

Fernando Alonso dijo que lo que tuvo que hacer es: "adaptar todo el coche a la nueva situación, poner todo el freno en las ruedas de atrás ya que cuando llegas a una curva tienes que pisar el embrague y frenar, para intentar cualquier adelantamiento es muy difícil apurar la frenada teniendo que reducir y luego dar un acelerón, porque ya te pasas de la línea óptima".

Confesó que: "solo quería acabar la carrera, pero tampoco quería ni lluvia ni nada extraño porque tal y como estaba el coche seguramente sería imposible terminar, pero al final no pudo ser y perdimos dos puntos, que tampoco llevan a ningún sitio. Si hay que tener una rotura y un abandono, mas vale que sea marchando noveno y no primero o segundo".