"Ahora el compromiso mío, como director de las relaciones internacionales, es cumplir con un acuerdo que pidió un grupo de países en el Grupo de Río: cesar declaraciones y dar espacio a unos mediadores", señaló Uribe a periodistas tras su participación en un foro con estudiantes de una universidad de Bogotá.
Agregó que su Gobierno sufre cuando tiene dificultades en las relaciones "con algún país hermano, y el Gobierno siente alegría cuando" estas se pueden mejorar.
Uribe tuvo un fuerte cruce de palabras con Chávez, en Cancún, México, en donde coincidieron al asistir a la Cumbre de Río.
El presidente colombiano le reclamó al mandatario venezolano por el embargo comercial y este le contestó que desde Colombia lo querían asesinar insinuando que Uribe tendría algo que ver con ello.
Tras el altercado, Uribe y Chávez aceptaron la conformación de un "grupo de países amigos" que ayude a ambos Gobiernos a superar sus diferencias.
El presidente Chávez dijo que el grupo de "países amigos" lo conforman, entre otros, Argentina, Chile, Brasil, México y República Dominicana.