www.diariocritico.com
Mata por amor

Mata por amor

viernes 22 de enero de 2010, 15:46h
Hoy no quiero escribir de la actualidad política porque, tal como está el patio , prefiero un estruendoso silencio que evidencia mi hartazgo. Acabo de leer un artículo del colega Eduardo Suárez, corresponsal en Londres de 'El Mundo', que me ha dejado impresionada y ha hecho aflorar en mi todo tipo de dudas y contradicciones.

   Cuenta la historia de Frances Inglis una mujer que amaba con locura a su hijo Tom y al que mató  inyectándole heroína incapaz de soportar su sufrimiento. La fatalidad quiso , que el joven de 21 años lleno de vida y energía sufriera un accidente que lo dejó en estado vegetativo. Tom podía parpadear y mover levemente las manos y aunque los médicos pronosticaron una ligera mejoría el milagro no llegó. Frances tenía el corazón roto y  solo ponerte en su piel pone los pelos de punta. Supongo que tardó tiempo en madurar su decisión, que le fue muy difícil optar por matar al fruto de sus entrañas , antes que condenarle a una existencia, que ella consideraba muy por debajo de la dignidad que merece todo ser humano.

   En noviembre del 2008 -después de haberlo intentado sin éxito en otra ocasión-  selló con pegamento la cerradura del hospital, se  tomó una copa de whisky para poder  pasar el trago y le inyectó heroína a su hijo". Le dije que le quería con locura. Cogí la jeringa y le pinché en los dos muslos y en el brazo y espere a que muriera. Le dije que todo iría bien y tuvo una muerte dulce " relató al ser juzgada por los hechos.

   Un jurado popular la ha condenado esta misma semana a nueve años de cárcel tras pronunciar el veredicto de culpable. La sentencia fue recibida con gritos y abucheos de desaprobación por el publico que abarrotaba la sala y tanto el padre del chico como sus otros hijos y la novia de Tom, que en todo momento han respaldado su conducta reaccionaban con estupor.

Como digo estos hechos aparte de  conmoverme me ha planteado  dudas que no creo poder despejar. Mas allá de la consideraciones morales que en esta historia no pueden quedarse al margen y sabiendo que nadie puede arrogarse el derecho de privar de la vida a nadie ¿ que es mas cruel retirarle el alimento  y desconectarle de una maquina o proporcionarle una muerte rápida y una poco mas placentera?. ¿Cómo no pensar que este puede ser uno de esos casos en los que años después se ha obrado el milagro de la recuperación ¿ hasta donde deben o pueden llevar los limites del amor?.

   Son algunas de las muchas preguntas sin respuesta pero reconozco que me es muy difícil no sentirme solidaria con Frances. Tengo hijos, los quiero con locura, quiero morir yo antes que ellos y daría mi vida sin dudarlo por protegerles de cualquier peligro, pero  igual que he luchado siempre porque tengan una vida digna, quiero que cuando llegue su hora se vayan también con dignidad. Lo quiero para ellos y para mi. Tom dejó de sufrir en  septiembre el 2008 y ahora  Frances sufrirá una  larga pena en la cárcel por haberle liberado de su sufrimiento. La ley puede ser justa pero también... cruel.
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios