La empresa que lo gestiona, la Sociedad de Explotación de la Torre Eiffel (SETE), precisó en un comunicado que el retroceso en el número de visitantes fue más marcado en el primer semestre del año y se debió, principalmente, al efecto de la crisis económica mundial sobre el sector turístico.
Otras de las razones del descenso, añade la nota, son las condiciones climatológicas desfavorables y algunas de las obras que se han realizado en la Torre durante 2009, año en el que se celebró el 120 aniversario de su construcción.
El número de visitas descendió especialmente entre los visitantes extranjeros de países lejanos (Asia y Sudamérica), mientras las de los franceses se mantuvieron al mismo nivel que el año anterior.
La torre Eiffel, la construcción más elevada de París con 324 metros de altura, está abierta al público todos los días del año.