Dos corrientes marcadamente opuestas surgen de la batalla preelectoral, de las encuestas que varios analistas consideran "prefabricadas para inducir a la población a votar por un determinado supuesto ganador", de las manifestaciones de apoyo o rechazo a la autonomía, sin embargo en la arquitectura de la construcción del proceso y su consolidación para encontrar soluciones a la problemática que hace a los Factores Económico, Político, Psicosocial, Tecnológico, el pueblo comprende que nada es mejor que preservar el sistema democrático pese a sus imperfecciones o a los equívocos de mala o buena fe de los gobernantes de turno.
Este domingo 6 de diciembre de 2009, el pueblo decidirá conciencialmente con devoción patriótica, meditada profundamente sobre los pro y contras de su accionar -de lo que desea o puede ocurrir para las generaciones del presente y del futuro-, el mejor destino de la patria.
Se advierte dos tendencias claramente identificables, la que representa el oficialismo con su candidato el actual Presidente de la República, Evo Morales Ayma, que sin renunciar a su investidura 90 días antes como lo hacían otros políticos en función de gobierno pretendientes a ser reelegidos, hizo campaña en torno a la nacionalización de los hidrocarburos, su política antineoliberal, la vertebración caminera, lucha contra la corrupción, cuyo emblemático ícono resulta ser Santos Ramírez Valverde, que ocupó los más altos cargos de la función legislativa y también de la entidad petrolera del país, actualmente sumido en la desesperación de solo amenazar decir lo que sabe pero que en los hechos significa que tiene aun el apoyo del algún político de gran influencia y la corriente que lideriza Manfred Reyes Villa, que plantea Seguridad y Empleo, una sociedad democrática, humanista y libertaria, tanto Estado como sea necesario tanto mercado como sea posible, industrialización de los recursos naturales y capital social, autonomía de la sociedad y el individuo, una política exterior abierta y no alineada como instrumento de desarrollo, una República atractiva para las inversiones, generadora de empleo, capital de arranque de mil dólares para un millón de bolivianos emprendedores, descentralización de las finanzas públicas, una Republica transparente y una ciudadanía moral en la que haya control social de la inversión pública, independencia del Poder Judicial, una República con justicia social, con igualdad de oportunidades, una República Autonómica y Solidaria, con mejores salarios para los trabajadores y preservación de las libertades democráticas.
Otra opción la representan Samuel Doria Medina y René Joaquino, cada uno con una propuesta de conciliación y reflexión sobre el devenir de nuestro país.
Doria Medina ofrece creación de empleo con apoyo del Estado a quienes tengan iniciativas y sean emprendedores. Joaquino plantea una nueva forma de hacer política con actores políticos generacionales nuevos, en que la pobreza no sea un escollo para lograr el progreso y desarrollo, en lo individual, colectivo social y del Estado. Son opciones que comienzan a recorrer camino.
Serán no quepa duda las corrientes que cuenten con el mayor apoyo ciudadano. El primero, Evo Morales Ayma se siente "ganador absoluto", el segundo Manfred Reyes Villa le disputa la primacía, pero el pueblo en su sabiduría colectiva, con su voto, podría dar grande sorpresa y obligar a que los dos más votados vayan a un segunda vuelta, que en los hechos representaría afán de preservar el Estado de Derecho libre de injerencias y dependencias externas y haya equilibrio de Poderes para que se atienda las necesidades prioritarias de la población más allá de las desavenencias, intencionalidades y mezquindades políticas o de resentimientos que el tiempo se encarga de neutralizarlas.
Los bolivianos con su voto decidirán ir por el ancho camino de la democracia en la que los problemas se resuelven a través del diálogo, la confrontación de ideas fuerza, la polémica constructiva, la discusión enérgica, desechando todo vestigio de enfrentamiento que podría deparar sombrío porvenir para las generaciones del presente y del futuro.