Según ha explicado el alcalde de la ciudad, Alberto Ruiz-Gallardón, la actuación permitirá además crear amplios espacios públicos, zonas verdes, dotaciones sociales, así como áreas infantiles y de mayores. En total, se demolerán medio centenar de viejos edificios de baja altura y se construirán en su lugar once nuevos inmuebles, de seis y nueve plantas, con capacidad para unas 650 viviendas. El plan mantiene los siete edificios de nueva construcción en la zona perimetral de la colonia.
En la zona central de esta colonia, de comienzos de los años sesenta, se rehabilitarán una veintena de edificios como muestra de la arquitectura de la época. Cuatro se destinarán a dotaciones y el resto a viviendas. Además, la UVA contará con un lugar de referencia y encuentro ciudadano. El plan parcial prevé la demolición de seis de los edificios situados en la zona central para permitir la creación de una amplia plaza como lugar de encuentro y referencia de la colonia. Junto a ella, se mantendrán la iglesia actual y el centro educativo.
En la rehabilitación de los edificios originales, proyectados por el arquitecto Higueras, se mantendrá su configuración exterior, que es la que proporciona a los inmuebles su expresividad arquitectónica y la que les hizo acreedores de reconocimiento internacional en su momento. En el interior, y debido a la necesidad de adaptar las viviendas a la normativa del Plan General, se crearán espacios de doble altura para evitar la sensación de agobio de los techos bajos y compensar, en el computo total del volumen de la vivienda, la baja altura del resto de las piezas.
El plan parcial contempla también soluciones de movilidad. Establece la apertura de la calle de Abizanda y da a la calle del Acebedo prioridad peatonal. Además, entre otras medidas, el viario interno de la colonia se conectará con la calle del Capitán Cortes y con la avenida de la Virgen del Carmen.