En medio de agresiones verbales y físicas en contra de varios asambleístas del oficialismo, ayer concluyeron los encuentros territoriales en Santa Cruz.
La intolerancia nuevamente ganó ayer el campus de la Universidad Gabriel René Moreno cuando grupos de exaltados impidieron el normal desarrollo de las deliberaciones de las diferentes comisiones de la Asamblea Constituyente
Los dos días el funcionamiento de las 21 comisiones fue en extremo irregular, sobre todo ayer.
En horas de la tarde, luego de un día impregnado de violencia los constituyentes del Movimiento Al Socialismo (MAS), decidieron no asistir a los encuentros porque no habían garantías suficientes.
La Comisión de Poder Legislativo no funcionó ni un momento, el conflicto suscitado entre constituyentes del oficialismo y la oposición, así como la presencia de ciudadanos agresivos, provocó ayer la suspensión de las audiencias. Una turba impidió la instalación de las sesiones de la Comisión de Legislativo que preside César Cocarico.
El asambleísta indicó que esta agresión ya tuvo un antecedente el lunes cuando "me secuestraron por dos horas en un aula y concluyó con el golpe que le propiciaron a la asambleísta Tania Ramírez aspecto que no se dio cobertura necesaria".
"Hoy la Comisión de Legislación tenía que reunirse desde las ocho de la mañana, ya a las nueve y media pretendimos instalar la sesión pero la misma gente del día lunes que me secuestró y golpeó a la asambleísta Ramírez de Potosí, nuevamente nos agredió e insultó, señalando que ellos eran el pueblo que mandaba", explicó Cocarico.
La turba exigía que la vicepresidencia de la Comisión de Legislación sea ocupada, tal como le correspondía por reglamento, por una asambleísta de la alianza opositora Poder Democrático Social (Podemos). Debido a esos incidentes el constituyente, quien preside la Comisión del Poder Legislativo, anunció que no sesionarán "porque no existen las garantías y las condiciones necesarias para trabajar en esta ciudad".
En la misma situación estuvo la Comisión de Autonomías y Descentralización y sus integrantes decidieron suspender los trabajos.
Comisión de Autonomías
Las autonomías fueron la manzana de la discordia, como era de esperarse los cruceños tenían bien definido que en los encuentros territoriales tenían que hacer prevalecer su intención de tener gobiernos autónomos.
El debate sobre la futura aplicación del régimen autonómico en Bolivia mostró un escenario de polarización entre la posición del Gobierno y la tradicional demanda cívica de Santa Cruz, durante el encuentro territorial constituyente que concluyó este martes en medio de incidentes violentos.
Las agresiones verbales y físicas se dieron con mayor énfasis en la Comisión de Autonomías, cuyo presidente, Saúl Avalos fue víctima de la intolerancia de algunos ciudadanos cruceños, quienes no se contentaron con insultarlo, sino que hasta lo golpearon.
Avalos señaló que en ninguno de los anteriores encuentros se presentaron ese tipo de problemas, ya que las propuestas de autonomías fueron dadas a conocer en ambientes tranquilos y sin agresiones.
Esos hechos que se repitieron en varias comisiones aunque no con la misma agresividad, rebasaron la tolerancia de los asambleístas del oficialismo quienes pasado el medio día de ayer, decidieron no asistir al trabajo en horas de la tarde.
Lazarte responsabiliza
La presidenta de la Asamblea Constituyente, Silvia Lazarte (MAS), responsabilizó a la Prefectura, la institución cívica y el Municipio de los incidentes suscitados en el desarrollo del encuentro territorial. Aseguró que esas acciones violentas afectaron el trabajo de las comisiones. "Trataron de hacer suspender desde la inauguración, hubieron agresiones físicas en las comisiones de Autonomía, Tierra y Territorio, Legislativa y Educación y a pesar de todo seguían trabajando. Pero por la presión, de la gente será de las calles o gente que pertenece al Prefecto, cívicos o el Alcalde, eso habrá que investigar, no lograron continuar su trabajo y otras suspendieron por falta de garantías", dijo.
Dos bandos
La confrontación mostró claramente dos bandos, uno a favor de los representantes del Movimiento Al Socialismo y su ponencia, y el otro contestatario que intentaba reivindicar a gritos la demanda autonómica y que expresó su repudio al partido de gobierno sacando a luz los temas relativos a la corrupción, los avales políticos y el aprovechamiento de Bienes Incautados.
Las acciones violentas de este lunes, volvieron a cobrar fuerza este martes con la vigilia de los grupos desde muy temprano. La presión por ser escuchados o por acallar al contrario apelando a insultos de grueso calibre, golpes y empujones derivó en la suspensión de las audiencias para conocer las propuestas al considerar que no había garantías para las comisiones.
Caos y vandalismo
La presidenta calificó la situación como caótica y vandálica, pues, además de defender sus ideas, intentaron agredir a los constituyentes. Esa fue la situación que se vivió en la Comisión de Autonomía donde el constituyente Saúl Avalos que presidía ese trabajo declinó continuar, sin embargo, los representantes de Podemos y Autonomía para Bolivia reiniciaron el trabajo para recibir las propuestas en ausencia del MAS.
Pocas fueron las comisiones que funcionando en el mismo campus universitario no tuvieron problemas por la presión de grupos antagónicos. La Comisión de Tierra y Territorio evitó la confrontación al realizar reuniones fuera de ese escenario con representantes de Anapo, la Superintendencia Forestal y organizaciones indígenas.
Dada la situación la directiva de la Asamblea Constituyente dejó en manos de las respectivas directivas de comisión la decisión de continuar trabajando o suspender definitivamente en la última jornada de trabajo en Santa Cruz.