En un comunicado remitido a diariocrítico por la Jefatura Superior de Policía se informa de que como consecuencia del citado control se procedió a la detención de ocho de estas ciudadanas (cuatro brasileñas, dos argentinas, una paraguaya y una venezolana) por estancia irregular en España al carecer de la documentación necesaria para ello.
Al mismo tiempo, añade el comunicado, se impusieron cuatro salidas obligatorias a otras tantas mujeres, por haber dejado de cumplir los requisitos declarados a la entrada en el país, fundamentalmente el objeto de la visita a España como turistas.
Del resto se indica que aunque tenían permiso de residencia y trabajo, la actividad autorizada en la mayoría de los casos era distinta a la ejercida, por lo que se ha dado cuenta a las distintas Subdelegaciones del Gobierno que resolvieron las autorizaciones, para su posible extinción.
Finalmente, se procedió a la detención de los encargados J. M. G. B. y J. A. B. como autores de presuntos delitos contra los derechos de los trabajadores, relativo a la prostitución (por el lucro obtenido con esta actividad y por aprovecharse del estado de necesidad de las “irregulares”, que no pueden acceder a ninguna actividad reglada) y contra los ciudadanos extranjeros, delitos en los que también se ha imputado al propietario J. V. I. G., que no se encontraba en el local en el momento de la actuación.