Se reportan diez muertos, cuatro casos por determinar la causa de su fallecimiento y 455 personas enfermas. Es un problema que nos afecta a todos y que experimenta un rebrote agresivo en estas últimas semanas. El curso futuro de la gripe A no es del todo predecible, pero la sociedad está luchando junto a las autoridades de salud por paliar en lo posible sus efectos y minimizar sus consecuencias.
Pese a lo difícil y doloroso de esta tarea, cuando finalmente haya quedado atrás se podrían obtener varias lecciones positivas tanto a los gobernantes como a los gobernados. El combate contra el virus de la Influenza AH1N1 sirve hoy de elemento catalizador de las acciones que de conjunto y sobre la base de un protocolo y métodos únicos emprenden las instituciones públicas y privadas de salud.
Unidos en torno al Ministerio de Salud, acatamos y cumplimos sus disposiciones y apoyamos sus acciones. Los medios dan amplios y sistemáticos espacios a las medidas preventivas y alertan sobre su sintomatología, recogen en sus espacios informaciones de fuentes oficiales y opiniones constructivas de especialistas, así como noticias y comentarios provenientes de otras zonas del planeta.
¿Por qué esta labor ha sido exitosa? Por el respeto al trabajo de los medios de comunicación y voluntad de colaboración del Ministerio de Salud e instituciones. ¿Esta experiencia podría aplicarse a otros ámbitos? Respeto y voluntad de colaboración son las claves. ¿Lo entenderá el resto de las autoridades? Ojalá que la respuesta sea también positiva.
Si (
No(
