"Es muy probable que el momento de mayor contracción de la actividad haya sido ya superado", afirmó Miguel Angel Fernández Ordóñez, durante un discurso para presentar el informe anual 2008 del banco.
No obstante, según el Banco de España, "la trayectoria del empleo que acompaña a este escenario es, en todo caso, preocupante, ya que, a pesar de las señales algo más positivas en algunos indicadores recientes, ligadas en parte a factores estacionales".
"El proceso de destrucción de puestos de trabajo puede prolongarse durante algún tiempo y la tasa de paro continuar todavía su senda ascendente", consideró el Banco.
La tasa de desempleo se situó en el 17,36% en el primer trimestre, y la destrucción de empleo sigue siendo muy elevada, pese a una caída del número de parados en mayo respecto a abril.
El gobierno consideró que la economía española va a seguir en recesión al menos hasta finales de 2010, con una contracción del PIB del 3,6% en 2009 y del 0,3% el año siguiente.
La vuelta al crecimiento debería producirse en 2011, con una progresión del Producto Interior Bruto (PIB) del 1,8% y del 2,7% en 2012, según el Gobierno.
Ordóñez alertó, no obstante, sobre los peligros que corre el crecimiento por culpa del paro.
"Existe el riesgo de que, como ocurrió en el pasado, el fuerte aumento del paro adquiera gran persistencia y que ello retrase la recuperación (económica) posterior", según él.