Los empresarios brasileños contradicen al Gobierno y niegan una pronta recuperación

El Gobierno insiste en que Brasil ya está emprendiendo la recuperación, después de que la economía se contrajo un 3,6% en el último trimestre de 2008 y de entrar en recesión técnica en los tres primeros meses de este año, según los cálculos que maneja el Ejecutivo, aún no confirmados de forma oficial.

   El ministro de Hacienda, Guido Mantega, insistió el lunes en que en el segundo trimestre se registrará crecimiento y en los últimos tres meses del año Brasil "acelerará" hasta tasas cercanas al 4%.

   El ministro de Planificación y Presupuesto, Paulo Bernardo Silva, adelantó este martes que Brasil crecerá un 0,7% en el cómputo del año, según la última previsión que hará pública mañana.

   Estas previsiones chocan con la visión de empresarios y de organismos internacionales, como el Fondo Monetario Internacional (FMI), que considera que Brasil sufrirá una recesión del 1,3% este año.

   El representante de los industriales mostró especial preocupación por la caída del 30% de las exportaciones de productos manufacturados, incluyendo maquinaria, automóviles, artículos siderúrgicos y celulosa.

   "Revertir ese escenario depende de la demanda global, pero también de que Brasil cuide de la competitividad de las exportaciones, con rebajas tributarias, reducción de la burocracia y del costo de la financiación a las exportaciones", consideró Monteiro.

   El descenso de las exportaciones de productos industriales ha desplazado a tradicionales clientes de Brasil, como Estados Unidos, en favor de China, que se ha convertido en el primer importador de artículos brasileños, con una cesta de compras compuesta de soja, mineral de hierro y otras materias primas.