Bruni ha llegado incluso a eclipsar a Sarkozy en varios de los actos de la jornada, lo que ha llevado al mandatario galo a destacar en público el "
éxito" de su esposa en España y a manifestar que no sabía que
"una italiana convertida en francesa" podría representar tan bien a Francia en Madrid.
"Que los españoles sepan que son queridos en Francia y que mis compatriotas sepan que los españoles esperan mucho de Francia", ha dicho
Sarkozy ante los franceses residentes en España reunidos en la Embajada de Francia.
El avión presidencial galo ha aterrizado a las 11.30 horas en el madrileño aeropuerto de Barajas, donde esperaba el ministro de Exteriores,
Miguel Ángel Moratinos. La primera parada de Sarkozy y Bruni ha sido el Palacio de El Pardo, donde ambos se alojan y donde los Reyes les han dado la bienvenida con honores militares.
Don Juan Carlos y Sarkozy han saludado a las delegaciones de los dos países, la española encabezada por el presidente del Gobierno,
José Luis Rodríguez Zapatero. Ha sido éste un primer encuentro que continuará este martes con la XXI Cumbre bilateral, en la que los dos mandatarios buscarán reforzar la cooperación policial y judicial contra el terrorismo e impulsar proyectos en materia de seguridad e infraestructuras energéticas y de transportes.
El siguiente acto público ha tenido lugar en el Palacio de la Zarzuela, donde los Príncipes de Asturias se han sumado a los Reyes para compartir un almuerzo con el matrimonio Sarkozy. Ahí se ha producido el 'esperado' encuentro entre Bruni y
Doña Letizia.
Sarkozy felicita a Rajoy
Cina de gala hispano-francesa
El punto culminante de esta primera jornada es la cena de gala organizada en el Palacio Real, con Zapatero y representantes de altas instituciones del Estado, los portavoces parlamentarios, empresarios y representantes de la cultura y otros ámbitos sociales. Pero antes, los Reyes han sido los cicerones de Sarkozy y Bruni en el Museo del Prado.
Sarkozy se ha reunido a continuación con el presidente del PP,
Mariano Rajoy, a quien ha felicitado por los resultados de las recientes elecciones celebradas en Galicia y el País Vasco y por las perspectivas que tienen los populares en las europeas del 7 de junio. Al término de la reunión, Rajoy también ha tenido la ocasión de conocer a Bruni.
Si bien en las cenas de gala que se celebran coincidiendo con una visita de Estado los invitados superan el centenar, para esta ocasión se espera completar el aforo máximo del comedor de gala del Palacio, en cuya mesa caben unos 140 comensales.
El martes, tras un homenaje al soldado desconocido en la Plaza de la Lealtad, Sarkozy acudirá al Congreso de los Diputados, donde le esperarán Zapatero y los presidentes del Congreso y del Senado,
José Bono y
Javier Rojo, respectivamente, para escuchar sus palabras en un acto parlamentario que se celebrará en el hemiciclo. Bono ha reconocido que hay
"cierta expectación" ya que, ha dicho, "no es un político convencional" y, además, Francia es para España
"algo más que una nación vecina".
Después Zapatero y Sarkozy presidirán en el Palacio de la Moncloa la XXI Cumbre hispano-francesa. Ambos mandatarios firmarán una declaración institucional que recogerá la creación de un comité de planificación y coordinación estratégica sobre seguridad interior y sentará las bases de los equipos conjuntos para llevar a cabo operaciones contra el crimen organizado, el narcotráfico y la inmigración ilegal.
También impulsarán la interconexión eléctrica transpirenaica y el enlace de alta velocidad entre Figueres (Girona) y Perpiñán, que debería estar listo a finales de 2012 o principios de 2013.
Bruni tendrá mientras una agenda paralela; visitará junto a la Reina el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía y almorzará en la Moncloa con la esposa de Zapatero, Sonsoles Espinosa. Las dos se juntarán con sus maridos en el café y, al concluir, el matrimonio Sarkozy regresará a París.