CiU corteja a Piqué para llenar su flanco más conservador

En Convergencia i Unió están eufóricos. La pérdida del acuerdo que el PSOE tenía con el PNV en el Parlamento ha dado alas a la coalición nacionalista moderada catalana.

Artur Mas ya piensa en las próximas autonómicas catalanas antes aún del desenlace de las elecciones europeas. Curiosamente si en las europeas CiU va con su cara más independentista, con el economista Ramon Tremosa, operación destinada a “levantarle” votos a ERC, para las catalanas tiene un as en la manga. Convergencia piensa acentuar después de las europeas su perfil más conservador de cara al mercado catalán. Así cubriría sus dos extremos.

Para completar el espectro ideológico Mas ha pensado en un peso pesado: Josep Piqué. Aunque todos niegan que haya una operación en marcha, lo cierto es que la idea de CDC es intentar crecer entre los sectores liberales e incluso conservadores. Quizás por ello, Mas ha propiciado diversos encuentros con Piqué. El que fue presidente de los populares catalanes se ha entrevistado con el presidente de CiU. ¿La excusa?, consultar a Piqué sobre la alternativa económica de los nacionalistas moderados. Esta ha sido la explicación a una larga reunión entre Artur Mas y el actual presidente de Vueling, que durante su última etapa política intentó revitalizar el PP catalán a partir del llamado giro catalanista que terminó, como es sabido, con una salida precipitada.

Piqué empezó su carrera política en democracia en el gobierno de Jordi Pujol. Entró en la administración del departamento de Industria, que presidía el entonces republicano Joan Hortalà, ahora presidente de la Bolsa de Barcelona. Luego Piqué dejó la política y se dedicó a los negocios en el influyente grupo de presión que es el Círculo de Economía, de donde fue fichado por Aznar para entrar en su gobierno.

Después de salir del PPC, Piqué ha ido distanciándose de su antiguo partido, hasta llegar al extremo que en una reciente entrevista ha llegado a acusar al partido que presidió en Cataluña de comportamientos sectarios. Ante la sinuosa trayectoria de Piqué, que en la Universidad fue comunista, las apuestas están abiertas.