Todos los jueves por la mañana en el Hospital materno-Infantil de la Paz, se imparten sesiones de musicoterapia que pretenden que los más pequeños se olviden de los agresivo que puede ser para ellos el entorno de un hospital, expresen sus emociones, y se relacionen con otros niños que se encuentran en su misma situación.
El Hospital Materno-Infantil de La Paz de Madrid ofrece a sus pequeños pacientes una terapia diferente para sobrellevar las pruebas médicas y los transplantes, ya que a través de la música los niños ingresados expresan sus emociones y se relajan o se activan dependiendo del momento.
Las sesiones se realizan todos los jueves a partir de las 11.00 horas, donde se busca que los niños se relacionen con el resto y donde también se busca dar apoyo a las madres.
El subdirector gerente del Hospital Materno-Infantil La Paz, Javier Cobas, ha indicado que la musicoterapia tiene una doble función, por una lado sirve como entretenimiento "para que los pacientes olviden la situación que viven y el entorno agresivo que puede ser para ellos el hospital", y otro ayuda a "estimularlos o relajarlos".
Además, Herminia Ramos, supervisora de enfermería de la Unidad de Trasplante Pediátrico del Hospital de la Paz de Madrid, ha asegurado que es una "entusiasta" de este tipo de terapias, y que podría contar, sin parar, "mil historias diferentes" y mil anécdotas derivadas de la musicoterapia.
Ramos ha apuntado los beneficios de la música y ha dicho que los objetivos dependen de qué "se quiera conseguir". Ha explicado que "hay niños que están recién trasplantados, están en un aislamiento importante, no pueden salir de la habitación y tienen su sesión individual".
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