La afirmación fue hecha por el responsable de comunicación de la representación de la ONU, Roberto Brockman, quien, por requerimiento de La Prensa, hizo la consulta respectiva a la japonesa Yoriko Yasukawa, quien dirige esa oficina en La Paz.
“Naciones Unidas —manifestó Brockman—, básicamente, se ponen a disposición de los actores políticos bolivianos en caso de que soliciten formalmente un diálogo y ve con mucho agrado que se hayan puesto de acuerdo en el tema de solicitar observadores”.
El pedido del Prefecto
El prefecto de Santa Cruz, Rubén Costas, dijo hace cuatro días respecto del comienzo, por parte del Ejecutivo, de la fase de aplicación de la Constitución Política del Estado (CPE), promulgada el 7 de febrero por Evo Morales, que “siempre es posible dialogar”, pero “no solamente con el Gobierno, sino (también con) los actores de la sociedad civil, los municipios y la comunidad internacional”.
Morales respondió al día siguiente a Costas que “el Gobierno nacional es transparente, no tiene miedo a nadie. Veedores, vengan de donde vengan, son bienvenidos”.
El Mandatario consideró además importante que los entes internacionales puedan acompañar la aplicación de los resultados del referéndum sobre el latifundio, realizado el 25 de enero junto con el constitucional, y los pasos que se darán para otorgar autonomía a los departamentos, regiones y pueblos indígenas de Bolivia.
Brockman resaltó la actitud “concertadora” de los políticos bolivianos para facilitar la presencia de observadores.
Adelantó que, como en el diálogo de octubre de 2008 que desembocó en la firma de un acuerdo en el Legislativo el día 21 de ese mes, la plataforma de observación de la ONU estaría compuesta por Yasukawa y dos funcionarios de ese organismo.
Sólo por requerimiento de las partes, se ampliaría esa comisión con representantes de las Naciones Unidas llegados expresamente con ese propósito.
Sin embargo, según El Deber, Costas puntualizó ayer que “no solamente tiene que haber veedores, sino garantes, para que lo que se diga y lo que se acuerde se cumpla ante la comunidad internacional. No se confundan con lo que nos dejó el anterior diálogo, donde solamente pusieron facilitadores para que sean convidados de piedra”. El Prefecto subrayó que no sólo es necesaria la presencia de las máximas autoridades departamentales que militan en la oposición, sino del resto de la sociedad civil, la que votó por el No a la nueva Carta Magna.
Consideró además que el oficialismo “no tiene en este momento predisposición para hablar, sino sólo para imponer”.
El presidente Morales advirtió en reiteradas oportunidades que, en caso de que la oposición obstruya la aprobación de leyes en el Congreso, recurrirá a los decretos para aplicar la nueva Carta Magna.
Tras la aprobación de la CPE, el Ejecutivo requiere adecuar las anteriores normas a la nueva Constitución.
El primer paso dado en ese sentido fue la emisión de un decreto, el 18 de febrero, para la reorganización del Órgano Ejecutivo, que de 17 pasó a tener 20 ministerios.
Preocupación de la ONU
El anterior fin de semana, funcionarios de la Prefectura cruceña fueron agredidos por miembros del Movimiento Al Socialismo (MAS) mientras Costas salía del aeropuerto El Trompillo de la capital oriental.
Debido a este incidente, el martes 19, la ONU, a través de Yasukawa, emitió un comunicado en el que “manifestó su preocupación por la reaparición de situaciones de intolerancia y de violencia en el país”.
“El Sistema de las Naciones Unidas —prosigue el comunicado— ratifica su llamado a todos los actores sociales y políticos del país a resolver sus diferencias dialogando y en forma pacífica. La Coordinadora quiere también resaltar la clara condena a estos hechos que manifestaron autoridades gubernamentales y regionales”.
El diputado de la fuerza opositora Podemos Antonio Franco dijo que la predisposición de la ONU para observar el diálogo debe ser acogida con “optimismo” y señal de que en el país “hay instituciones internacionales que creen en nuestra capacidad de diálogo”.
Por su parte, el diputado del MAS Jorge Silva valoró la actitud de la ONU al decir: “Esa respuesta inmediata será tomada en cuenta por mi partido, ya que el Presidente dio el primer paso para su presencia (de las Naciones Unidas) en el proceso de aplicación de la nueva Constitución Política”.
Este medio quiso obtener la posición del Gobierno, pero los funcionarios más allegados al Presidente estaban ocupados.
Los detalles
La representante de la ONU en La Paz, Yoriko Yasukawa, participó en octubre de 2008, en calidad de observadora, en los diálogos entre la oposición y el oficialismo que precedieron la firma del acuerdo del 21 de ese mismo mes.
En esas jornadas también participaron como veedores la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), la Unión Europea (UE) y la Organización de Estados Americanos (OEA).
La ONU también fue observadora en el referéndum constitucional del 25 de enero.
La ONU manifestó el 19 de este mes su preocupación por el rebrote de violencia en Santa Cruz, donde la anterior semana grupos masistas atacaron a funcionarios de la Prefectura de ese departamento.
Mediante un comunicado instó a los bolivianos a recurrir al diálogo para resolver los problemas.
Recordó que los países e instituciones observadores expresaron en diferentes oportunidades la necesidad de incentivar la cultura de la paz.
LOS DATOS
El Prefecto cruceño desconfía del cumplimiento de los acuerdos suscritos con Evo.
Según Costas, el oficialismo ha demostrado predisposición sólo para imponer.
Podemos saludó ayer la disposición de la ONU de observar el proceso constitucional.