El portavoz de IU en el Ayuntamiento de Madrid, Ángel Pérez, criticó este miércoles en relación con la 'operación Chamartín' que "de nuevo serán las casitas las que pagarán las infraestructuras a realizar", como el cubrimiento de las vías de la estación, entre otras cuestiones, y todo en un contexto de crisis en el que el problema "no es que no haya viviendas sino que lo que no hay es dinero para comprarlas".
Pérez criticó que en los 30.000 metros cuadrados de edificabilidad concedidos por el Consistorio se podrían levantar 16.000 viviendas, de las que "sólo 2.000 serán de protección". El edil dudó además la intención de cualquier empresa "para meterse ahora en una operación de construcción de 30.000 metros de oficinas y viviendas". "Eso sí, si el alcalde dice que es inminente será porque sabe algo que no conoce ni el Ministerio de Fomento, ni doña Esperanza Aguirre ni yo y que no lo sepan ellos es algo que me llena de perturbación", ironizó el líder municipal.
Por su parte, el portavoz socialista de Urbanismo, Pedro Sánchez, exigió al primer edil que "no patrimonialice operaciones que no son suyas" porque la de Chamartín "es del Gobierno de España". El concejal del PSOE, que dijo que su Grupo apoyará toda acción que beneficie a los madrileños, dijo que lo que tiene que hacer ahora el alcalde es "explicar qué información tiene para ver si se puede llegar a un acuerdo o no en la 'operación Chamartín'".
Insistió en que si esta iniciativa se desbloquea será "por la acción del Gobierno de España y no por la del municipal, que lo que ha hecho hasta ahora ha sido entorpecer cualquier operación que pudiera desbloquear Chamartín, al igual que la 'operación Campamento'".
Los vecinos se manifiestan
Los vecinos y vecinas de la colonia Virgen de Begoña (Fuencarral-El Pardo) han recibido con absoluto escepticismo el anuncio, realizado por el alcalde de que cerrará “de forma inminente” el acuerdo de la Operación Chamartín. Según denuncia la asociación de vecinos de este barrio, un amplio terreno que se encuentra frente a sus viviendas y forma parte del ambicioso proyecto urbanístico, “lleva más de treinta años abandonado, y desde hace nueve años se llena de chabolistas, produciéndose ocupaciones y desalojos intermitentes”.
Los vecinos de Begoña no se fían del último anuncio de Gallardón. Por ello, se concentrarán este jueves frente al descampado que lleva décadas generando inseguridad y suciedad en esta colonia de viviendas modestas, que acusa un fuerte envejecimiento de población y presenta graves problemas de movilidad y accesos. La protesta se había anunciado antes de que la Operación Chamartín estuviese otra vez en boca de todos.