"
Ningún dato, anterior ni posterior, conocido por el juez, hacía pensar en la especial importancia o urgencia del ingreso en prisión del condenado por su especial peligrosidad", señala en su recurso de alzada Tirado, quien señala que el control de los casos es "
según prioridades". Así, rechaza que el caso haya acumulado "
retraso en el control" y que los hechos probados en el Acuerdo del Pleno del CGPJ contra él puedan ser "
merecedores de reproche disciplinario alguno".
El juez sancionado dice que la carga de trabajo que tenía su juzgado era "
muy elevada y de difícil asunción", como lo evidencian los datos aportados sobre el volumen de ejecutorias en trámite, reaperturas y datos aportados sobre el volumen de ejecutorias en trámite, reaperturas y archivo provisional. Se trata, a su juicio, de una situación que ocurre "
en el resto de los Juzgados de lo Penal de la provincia" y que "
no es nueva" pues "
se ha reiterado" en varias Juntas de Jueces.
No obstante, mantiene que la situación del juzgado en general "
no evidencia retrasos ni dilaciones relevantes en la incoación y tramitación de las causas" y "
el retraso materialmente existente no se refiere a una pluralidad de causas, ni es frecuente ni repetido". Además, ese retraso, "
no lo es en la dedicación del Magistrado a su función ni denota, por tanto, una actuación general o global" suya.
La responsabilidad del Estado
Tirado considera que el expediente abierto contra él quiere enjuiciar su conducta con criterios que le corresponden al Estado. Es decir, que "
late la confusión entre responsabilidad disciplinaria del Juez y la responsabilidad del Estado por el funcionamiento anormal de la Administración de Justicia o de otros poderes públicos".
En este sentido, recuerda ciertos déficit en la Administración de Justicia, como la falta de registros informáticos que, en este caso, hubieran podido interconectar a los dos juzgados sevillanos que llevaban sendas causas contra
Del Valle, o a los de varias provincias --en el Juzgado de Instrucción de Gijón se hallaba en trámite otra causa penal contra el presunto asesino--.
"Excusas baratas"
El padre de la pequeña
Mari Luz,
Juan José Cortés, pidió al juez de lo Penal número 1 de Sevilla que "
se deje de tonterías y de interponer excusas baratas y se responsabilice de su error, ya que por este fallo ha muerto una niña inocente".
Cortés aseguró que Tirado "
no cuenta con argumentos legales" y que lo que debería haber hecho es "
establecer una orden de búsqueda y captura, ya que sin tener en cuenta la peligrosidad de del Valle, éste tenía que estar cumpliendo condena y no en la calle".
Cortés indicó que cada uno tiene "
su responsabilidad, tanto el juez, como el Estado, como la secretaria", a lo que añadió que al Estado le corresponderá otro tipo de sanción "
por el mal funcionamiento de la justicia". Asimismo, el padre de la niña, aseguró que Tirado "
ha cometido una falta muy grave, por lo que se merece la retirada de la carrera judicial".