En su cruzada por desmantelar las políticas de lucha contra la violencia de género, la formación de extrema derecha Vox ha solicitado al Parlamento andaluz los nombres y apellidos de todos los trabajadores de las unidades de Violencia de Género entre los años 2012 y 2019.
La petición fue registrada el pasado miércoles en la Cámara andaluza. En ella, Vox solicita "relación detallada con nombres, apellidos, número de colegiados en sus respectivos colegios profesionales, si estuvieren dados de alta en ellos con la reseña de dichos colegios profesionales, y si no también, de todos los psicólogos, trabajadores sociales y médicos forenses que han integrado las Unidades de Valoración Integral de Violencia de Género".
También reclama los nombres de los miembros de los "Equipos psicosociales de los juzgados de Familia y equipos de menores en las ocho provincias de Andalucía, entre los años 2012 y 2019 completos".
El líder de la formación en Andalucía, Francisco Serrano ha justificado así su petición. "Se están violando sentencias de Altos Tribunales que exigen la colegiación. Los jueces dictan sentencias en base informes de profesionales no cualificados y altamente ideologizados y de los que depende la Libertad de un acusado o el futuro de niños".
Para Serrano es necesario "depurar entre quienes están formados y acreditados" para elaborar informes sobre el riesgo de las víctimas de la violencia machista, "y quienes actúan según motivos ideológicos".
Aunque tanto el PP como Cs en Andalucía han insistido en mantener las medidas de lucha contra la violencia de género y no dar "ni un paso atrás", Vox ejerce así la oposición y presiona a Juanma Moreno y Juan Marín, que todavía no se han pronunciado al respecto. En la Mesa del Parlamento andaluz, PP, Cs y Vox ostentan la mayoría, por lo que si el letrado acepta la petición, se enviará un requerimiento a la Consejería pertinente.