Más de un millar de personas se concentraron el 17-A ante la cárcel de Lledoners, donde se encuentra preso el ex conseller de Interior,
Quim Forn, a quien se rindió homenaje en el
primer aniversario de los atentados de Barcelona y Cambrils. Aunque los partidos políticos criticaron la "politización" de los actos de homenaje por el movimiento independentista,
Torra volvió a reivindicar la república catalana en el día de las víctimas.
Las entidades soberanistas ANC y Òmnium convocaron la concentración frente a la cárcel de Lledoners tras los actos oficiales de homenaje a las víctimas del 17-A, y hasta allí se desplazaron el president catalán y la mujer de Quim Forn,
Laura Masvidal. Torra dijo que el
rey Felipe VI no le dijo nada cuando le presentó a la mujer de Forn, y no dudó en reiterar el rechazo a la presencia del monarca, e incluso defendió las pancartas despleagas contra la presencia del Rey.
En su intervención en Lledoners, Torra insistió en que los independentistas "no debemos defender nada en los juicios, sino denunciar al Estado español autoritario que incumple su ley". El president catalán llamó a "atacar a este Estado español injusto" y reiteró que seguirán "hasta hacer efectiva la República y conseguir que los presos queden en libertad".
Torra subrayó que en el
acto institucional por los atentados del 17-A "faltaba gente", en referencia a los soberanistas presos y a los que se encuentran fugados en otros países, aunque según reivindicó "los independentistas están más fuertes que nunca".