Varapalo al desafío soberanista catalán. La mayoría absoluta que ostentan ERC, JxCAT y la CUP se esfumaría en una hipotética cita con las urnas, debido en gran parte a la debacle de la formación de
Carles Puigdemont y Quim Torra. Según un sondeo de
'La Razón', Cs sería la fuerza más votada, con el 25% de los apoyos y 37 escaños, mientras que ERC lograría 38 diputados, con el 24,1% de los votos.
Aunque la formación de
Oriol Junqueras pierde en votos frente a los 'naranjas', debido al sistema de reparto en las provincias catalanas, superarían al partido de
Inés Arrimadas por un escaño.
La principal diferencia respecto a las últimas elecciones es la pérdida de la mayoría absoluta soberanista en el Parlament, que pasa de 70 a 65 escaños, debido a la pérdida de apoyos de JxCAT, que pasaría de 32 diputados a 23, con el 14,9% de los votos.
El PSC, que mantiene la cuarta posición, mejoraría sus resultados respecto a diciembre de 2017, y aunque supera ligeramente en votos a JxCAT, acumulando el 15% de sufragios, conseguiría 19 diputados. Detrás de los socialistas, se situarían los 'comuns', que mantendrían los 8 escaños con el 7,7% de los votos.
Los 'populares' también mejoran ligeramente sus resultados en Cataluña, pasando de sus 4 diputados actuales a 5, con el 4,4% de los apoyos. El PP empataría así en escaños con la CUP, pese a que consigue un 5% de los votos.
Esta encuesta también apunta a que Cataluña sería un muro de contención contra la irrupción de VOX en el Parlament, ya que la formación de ultra derecha quedaría fuerza, con el 1,1% de los votos. Sin embargo, al igual que ocurrió en Andalucía, las hipóteticas elecciones estarían marcadas por la abstención, que afectaría especialmente a los votantes de JxCAT, En Comú Podem y la CUP.
Ante el retroceso del soberanismo, Cs podría intentar la investidura, con sus 37 escaños, y siempre y cuando consiga sumar los votos favorables del PSC, En Comú Podem y el PP, algo que resulta poco probable, al menos, en el caso de los 'comunes'. La formación 'morada' recuperaría la 'llave' del Govern, y debería decidir entre el respaldo al independentismo o a los llamados constitucionalistas.