La secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha acusado al PSOE de conceder veladamente un "indulto" a Magdalena Álvarez sirviéndose del Tribunal Constitucional, que el Gobierno controla de facto con mayoría de magistrados progresistas.
En declaraciones sobre la sentencia del Constitucional en relación con el 'caso de los ERE', Gamarra expresó su indignación y preocupación ante lo que considera una "alarmante" decisión judicial y la posible interferencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Gamarra no dudó en calificar la decisión del TC como un "indulto por la puerta de atrás", refiriéndose a la anulación de la condena por prevaricación de la ex ministra socialista en tiempos de Zapatero y también consejera andaluza. "No es un buen día para todos aquellos que creemos en la lucha implacable contra la corrupción", lamentó Gamarra, subrayando su descontento con la resolución del tribunal.
Para la secretaria general del PP, esta sentencia resulta "beneficiosa" para Sánchez y su partido: "Para quien sí es un buen día es para Pedro Sánchez y para su objetivo de borrar los delitos que afecten a la corrupción del PSOE". Según Gamarra, los indultos que el Gobierno estaba tramitando para dirigentes socialistas como Manuel Chaves o José Antonio Griñán "a lo mejor ya no los tiene que tramitar porque pueden ser indultados por la puerta de atrás en el Constitucional".
"Alarmante para la calidad democrática"
Además, Gamarra criticó con firmeza las declaraciones de Sánchez en un mitin del PSOE, donde halagó a Magdalena Álvarez en plena campaña electoral europea: "Hace dos semanas, en plena campaña electoral europea, el presidente del Gobierno o bien adelantó el fallo de una sentencia del TC o bien dio indicaciones de en qué sentido tiene que ir la sentencia". Gamarra añadió que "es alarmante para la calidad democrática".
La secretaria general del PP también destacó que, a pesar de la sentencia del TC, hay hechos que "ninguna sentencia podrá borrar". Según Gamarra, el caso de los ERE de Andalucía sigue siendo "el mayor caso de corrupción de la historia de España, que como no podía ser de otra manera afecta al Partido Socialista". Recordó que este escándalo de corrupción involucró a dos presidentes, vicepresidentes y cinco consejeros de la Junta de Andalucía, quienes desviaron hasta 680 millones de euros destinados a los parados "a amigos, familiares y a la compra de cocaína".
Gamarra también subrayó la consistencia del caso a lo largo del proceso judicial. "Hasta 20 jueces han visto este caso durante todo el procedimiento y en ningún momento se ha puesto en duda la existencia de un delito de prevaricación", afirmó, enfatizando la gravedad y claridad de los delitos implicados.
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