Planas cree que Garzón realizó unas palabras "desafortunadas" y defiende a toda la industria cárnica

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha sido entrevistado este martes en directo en el canal '24 Horas' de TVE sobre la polémica originada por su compañero de la cartera de Consumo, Alberto Garzón, a tenor de sus declaraciones sobre la industria cárnica española.

Planas, evitando más polémicas con su compañero, tal y como pidió la vicepresidenta segunda y líder del ala de Unidas Podemos en el Gobierno, Yolanda Díaz, se limitió a cuestionar lo que Garzón dijo en la ya famosa entrevista en 'The Guardian', defendiendo las tesis ya defendidas por Pedro Sánchez u otros miembros del Ejecutivo, como la portavoz y ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez: las palabras de Garzón "no reflejan la realidad del sector ganadero en nuestro país".

El titular de Agricultura evitó describir el ambiente en la reunión del Consejo sobre este desencuentro entre Garzón y el ala morada del Gobierno con el resto de compañeros socialistas, escudándose en la habitual excusa de que los miembros del Consejo de Ministros no pueden hablar de las deliberaciones del mismo.

Eso sí, preguntado sobre su postura en esta polémica, Planas cree que Garzón realizó unas palabras "desafortunadas" y defendió a toda la industria cárnica, sin hacer distinciones entre tipos de productores.

Una polémica innecesaria

Planas considera que es "una polémica que podríamos habernos ahorrado" por "respeto al sector ganadero de nuestro país".

Cuestionado más en concreto sobre la entrevista de la polémica en 'The Guardian', Planas reconoció no haber leído la entrevista al completo sino sólo la parte que le atañe, sobre la calidad de la carne y las macrogranjas, y dio a entender que no ha habido mucha comunicación con su colega a partir de que conociera el contenido de la entrevista.

Sí reveló que en este Consejo de Ministros de hoy martes han charlado tanto dentro como fuera de la reunión porque, dijo, es un "hombre de diálogo", dando a entender que se quería rebajar la tensión en este tema, pero sin dar la razón tan siquiera parcialmente a Garzón.

Preguntado explícitamente por las macrogranjas hay en nuestro país, el ministro prefirió encauzar la respuesta hacia la calidad de una industria cárnica a la que volvió a defender a ultranza, sin entrar en los detalles.