Según ha informado este miércoles RTVE, un gran grupo de unos 1.200 migrantes intentó entrar en Melilla saltando la valla y lo ha conseguido un gran número de ellos, unos 380, entrando en suelo español.
Es el segundo día de ataque a la valla tras el asalto de ayer miércoles, con más de 2.500 personas en el lugar, pasando unos 500 a la ciudad autónoma.
Los migrantes eran mayoritariamente de origen sudanés y están siendo identificados a lo largo de la jornada tras su salto a primera hora.
El salto en concreto tuvo lugar a las 7:25 horas y la zona del mismo estaba comprendida entre los pasos fronterizos de Barrio Chino y Beni-Enzar.
La Guardia Civil detectó su intención a las 6:00 horas y activó el "dispositivo anti-intrusión".
"Gran violencia"
El dispositivo desplegado evitó un asalto mayor, pero aún así entraron cerca de 400 personas y han provocado varios heridos en las fuerzas policiales, en torno a una veintena de agentes de la Guardia Civil.
La delegada del Gobierno en la ciudad autónoma, Sabrina Moh, ha vuelto a destacar la "gran violencia" empleada para el asalto, y los agentes han sufrido contusiones y cortes.
Estos migrantes emplearon piedras, garfios y palos. "La agresividad que hemos visto en la entrada de ayer y hoy no se ha visto en otras ocasiones", explicó la delegada Moh.
El Gobierno reforzará la plantilla de la Guardia Civil y Policía en la zona para evitar más incidentes como éste.