Juan Carlos I ha vuelto este miércoles a Galicia para estar en la regata de vela prevista el fin de semana en aguas de la localidad pontevedresa de Sanxenxo. Esta visita a España, la tercera desde su partida a Abu Dabi en agosto de 2020, llega poco después de la celebración de las elecciones generales del 23-J.
Como en otras ocasiones, el rey emérito ha venido en un avión privado al aeropuerto de Vigo (Pontevedra) pasadas las 14:00 horas. Allí le esperaba su amigo y regatista Pedro Campos, que ha llegado en su vehículo particular acompañado por su mujer, Cristina Franze, para conducirlo a Sanxenxo, donde el monarca pasará los próximos días.
Su llegada ha atraído a muchos medios de comunicación al aeropuerto y algunos curiosos que no han querido perderse el aterrizaje de la aeronave, bajo el sol, cerca del recinto.
El rey emérito tiene pensado salir a navegar en su barco el 'Bribón' y ser parte de la regata del sábado y el domingo, con el fin de poder prepararse para el campeonato mundial de la categoría 6m que se celebrará a finales de agosto en el Reino Unido.
Es el mismo tipo de visita que la que hizo el pasado año y esta pasada primavera, siendo de carácter privado y no institucional, no recibiendo visitas ni entrevistándose con personalidades.
A pesar de la cercanía de la celebración de los comicios generales, se transmite la idea de una estancia de bajo perfil, sin presencia mediática prevista y máxima discreción, que es también lo que le ha pedido estos años su hijo, el actual jefe del Estado, Felipe VI.
Las visitas del Emérito
Juan Carlos hizo una primera visita a España tras su huida a Abu Dabi en mayo de 2022, donde participó en las regatas de Sanxenxo, siendo aclamado por muchos aficionados de la vela y también por monárquicos que reclamaban su vuelta. Después, en abril de este año, volvio a nuestro país, todavía con más discreción, incluso asistiendo a un chequeo médico en Vitoria, alejado de los focos.
Sin embargo, ni las anteriores ni la esta visita gustan a Zarzuela, a la que le incomoda la presencia de un monarca que no ha querido dar explicaciones a la ciudadanía por sus cuentas y algunas irregularidades fiscales.
Hoy por hoy, se entiende que la Casa Real con Felipe VI desea que permanezca en Abu Dhabi y que su residencia allí sea permanente, por lo que un hipotético regreso a España en calidad de residencia fija sería un serio inconveniente para salvaguardar la imagen de la Corona.
Aparte de un discreto encuentro en Zarzuela en mayo del pasado año, padre e hijo se vieron durante unos minutos también durante el funeral de la reina Isabel II del Reino Unido y en el entierro de Constantino de Grecia, hermano de la reina Sofía.
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