El Gobierno ha decidido rechazar la opa que ha presentado el grupo húngaro Ganz Mavag (Magyar Vagon) sobre Talgo poniendo como excusa la "protección de los intereses estratégicos" del país. La decisión ha salido del Consejo de Gobierno de este martes, después del análisis de la Junta de Inversiones Exteriores del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa, que afirma que la operación supone "riesgos insalvables para la seguridad nacional y el orden público".
"La no autorización de la operación se produce en aplicación de la normativa vigente en nuestro país en materia de control de inversiones exteriores y con pleno respeto al Derecho comunitario y las competencias de la Unión Europea sobre inversiones extranjeras directas, protección del mercado interior y la libre circulación de capitales", asegura el Ejecutivo en un comunicado que ha salido tras la rueda de prensa del Consejo de Ministros.
En palabras del Gobierno Talgo es una empresa "estratégica dentro de un sector clave para la seguridad económica, la cohesión territorial y el desarrollo industrial de España". Por ello, ha decidido activar la normativa antiopas para frenar la operación, previo análisis de la Junta de Inversores Exteriores (JINVEX). Este organismo interministerial, que se encarga de informar sobre cada operación, declaró que la compra del 100% de Talgo por parte del consorcio húngaro traería "riesgos para garantizar la seguridad nacional y el orden público".
El Gobierno tenía como plazo hasta finales de octubre para pronunciarse sobre esta operación, aunque el primer término acabó el pasado 10 de agosto, pero la Junta de Inversiones pidió nueva información y subió el plazo hasta un máximo de 3 meses más. La autorización del Gobierno suponía un requisito indispensable para continuar adelante con la operación, en aplicación del escudo antiopas que fue aprobado con motivo de la pandemia del coronavirus.
Ante las primeras informaciones que ya hablaban del veto del Gobierno a la opa, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha decidido suspender "cautelarmente, con efectos inmediatos" la cotización de Talgo, "mientras es difundida una información relevante sobre la citada entidad". Pasadas las 2 de la tarde, la CNMV ha informado de que las acciones de la compañía retornaban a cotizar a partir de las 14:45.
La opa sobre el 100% de Talgo que ha planteado por el consorcio húngaro, que daba 5 euros por acción, suponía dar un valor a la compañía de 620 millones de euros. Magyar Vagon apoyaba su operación diciendo que el precio de 5 euros por acción ofrecido representaba una prima del 41,4% respecto a la media de la cotización de Talgo durante los 6 meses anteriores a la presentación de la oferta.
Relación de Magyar con el Gobierno húngaro
El 45% del capital del consorcio húngaro que buscaba comprar Talgo está bajo control de Corvinus, un fondo estatal húngaro. Este país hace poco ha entrado en conflicto con la propia Unión Europea por su acercamiento unilateral a Rusia y su rechazo a aceptar cuotas de refugiados.
Además, el directivo de Magyar Vagon, András Tombor, había sido asesor del Gobierno húngaro que también comandaba Orbán como primer ministro entre 1998 y 2002. Por eso, la Junta de Inversiones Extranjeras ha hablado de razones de seguridad nacional.