El conflicto entre Rusia y Ucrania ha conseguido crear un nuevo motivo de distanciamiento entre las 2 alas que forman el gobierno de coalición.
El PSOE, comandado por su secretario general, Pedro Sánchez, tiene claro que no habrá ninguna razón para desligarse de las decisiones que se tomen desde la UE y la OTAN, por mucho que EEUU llame a la intervención militar en la frontera ucraniana.
Mientras, el ala morada del Gobierno, representada por Unidas Podemos, saca más que nunca su bandera blanca del pacifismo y se opone a que la OTAN tenga planes de conflicto bélico con Rusia, cuando sostiene abiertamente que cualquier tensión es innecesaria. Defiende que no hay motivos para llevar tropas a la frontera Ucrania-Rusia ni que el país de Vladimir Putin vaya a invadir a sus vecinos por vía terrestre.
Sánchez se ciñe a la vía diplomática
Por ahora, el presidente Sánchez asegura que mantiene contactos con los líderes europeos y aboga por "la unidad, la distensión, el diálogo y la solidaridad con los socios y aliados" para frenar el conflicto.
Pero nadie oculta en el entorno socialista que si la OTAN y los aliados europeos llaman a la 'guerra', entendiendo nuestro papel como el envío de buques, aviones y demás efectivos militares, se llevará a cabo sin pestañear.
De hecho, ya han partido 2 buques y sigue en los planes el despliegue de cazas españoles hacia Bulgaria. Noticia que molestó mucho en Unidas Podemos y otros socios parlamentarios de la investidura que sostienen al Gobierno.
Unidas Podemos, molesto
Mientras tanto, varios dirgentes morados no esconden su decepción con esta rápida reacción española a favor de culquier intervención militar. No gusta que incluso el líder de la oposición, Pablo Casado, haya mostrado su apoyo incondicional al presidente Sánchez, "en la posición de Estado ante la crisis de Ucrania".
El problema no es sólo que el PSOE tenga la mayoría parlamentaria en representación en este gobierno de coalición, sino que además todas las carteras implicadas, Exteriores y Defensa, dependen de los socialistas.
De hecho, Margarita Robles ya ha mostrado su total apoyo a cualquier misión de la OTAN y el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, envió un mensaje muy claro a los socios de Unidas Podemos. "Las directrices en política exterior las marca el presidente".
De momento, lo que hay sobre la mesa es un documento parlamentario firmado por Podemos, Izquierda Unida, En Comú Podem, Alianza Verde, Bildu, BNG, CUP, Más País y Compromis en el que piden diálogo y el fin de la tensión belicista en la frontera ucraniano-rusa.