Los Mossos d'Esquadra han desarticulado este viernes una red de pederastas que captaba a menores de edad utilizando las redes sociales y aplicaciones de citas para realizar agresiones sexuales en grupo y grabarlo en vídeo. Los investigadores ya han detenido a 16 de estos presuntos agresores, 3 de los cuales han ingresado en prisión, y ahora están intentando identificar a otros 14. De momento, han podido localizar a 11 víctimas, dos chicas y 9 chicos, de entre 12 y 17 años, pero piensan que puede haber muchos más. "El número de agresiones sexuales es incalculable”, ha asegurado el responsable de la investigació, el cabo David López.
La investigación comenzó gracias a la denúncia de una víctima de 12 años que hizo que se pudiera localizar y detener al líder de la trama, que ya tenía antecedentes policiales por prostitución de menores en Valencia en 2010. Era un electricista de 48 años que vivía en Barcelona y tenía una vida aparentemente normalizada. Pero después de trabajar se metía en chats con menores de edad y con otros pederastas para ofrecerles orgías, que no eran otra cosa que violaciones en grupo a menores.
"Son personas de todos los estatus sociales, de entre 19 y 50 años", ha indicado el jefe del área de Cibercrimen, el inspector Josep A. López. Según los investigadores, 11 de los 16 detenidos respondían a personas aparentemente normales, con ninguna experiencia pedófila previa, a quién el líder de la trama invitaba a los encuentros sexuales que organizaba principalmente en su casa de Barcelona. También las víctimas vienen de todas las clases sociales. "Alguien puede pensar que son niños de ambientes difíciles; sí, algunos lo era, pero otros eran menores que podrían ser mi hijo o el de cualquiera", ha dicho el inspector.
De momento, se ha tomado declaración ya a una decena de víctimas. Quedan por identificar 14 menores más que aparecen en 250 vídeos, y eso lleva a la escalofriante cifra de 250 violaciones, que el principal investigado grabó entre 2016 y 2022. Fue en un piso de Barcelona, a veces con su móvil, a veces con cámaras ocultas, con las que realizaba vídeos de explotación sexual infantil que posteriormente compartía en chats con el resto de la trama. A algunas de las víctimas más vulnerables, las prostituían sometiéndolas a prácticas sadomasoquistas, a veces a cambio de dinero, drogas o regalos. Los Mossos han encontrado en su teléfono 2.000 conversaciones de carácter sexual. En la conversación entre dos de los acusados, uno de ellos llegó a presumir de haber cometido 79 agresiones sexuales a menores.
El mercado negro de prostitución infantil en las app de citas
"En las aplicaciones de citas hay un mercado encubierto de prostitución de menores que no aflora. Lo hemos hecho aflorar nosotros, pero no hay denuncias", señala el cabo López. También el jefe de Cibercrimen de los Mossos da una advertencia a los padres: "Nos falta mucha política de supervisión de lo que hacen nuestros hijos. A nadie se le ocurriría dejar a su hijo en Ciudad Juárez a las doce de la noche, porque es una ciudad muy peligrosa con muchos homicidios, pero Ciudad Juárez está en todas nuestras casas en cada momento si no sabemos qué hacen nuestros hijos, con quien contactan o qué aplicaciones usan".
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