La pretendida investidura del ex president de la ANC Jordi Sánchez, actualmente en prisión preventiva, no parece fácil que prospere. El consejo político de la CUP ha decidido este sábado abstenerse ante su eventual candidatura propuesta por JxCAT lo que dejaría en minoría a los independentistas en el Parlament, si se mantiene el reparto de escaños como en la actualidad.
En las pasadas elecciones JxCAT, ERC y la CUP sumaron 70 escaños frente a los 65 de Ciudadanos, PSC, PP y Comunes. Sin embargo, la imposibilidad de votar de los diputados huidos en Bruselas, Carles Puigdemont y Toni Comín, -la Mesa del Parlament no les permitió delegar el voto a diferencia de los diputados en prisión preventiva-, les resta dos votos a favor de la pretendida candidatura a la investidura de Sánchez. Si a estos cálculos se le añaden las 4 abstenciones cuperas, el bloque llamado 'constitucionalista' quedaría por encima de los independentistas por un solo voto 65-64. Quedaría así tumbada la candidatura nonata de Jordi Sánchez.
El propio portavoz de ERC, Sergi Sabrià, dio vía libre al 'plan B' tras el paso al lado de Puigdemont y rechazó que el nombre del líder republicano, Oriol Junqueras, esté sobre la mesa de negociación. "ERC no será nunca un freno para conseguir tener un gobierno pronto", aseguró antes de conocerse el resultado de la votación de la CUP. No obstante, su hipotético apoyo a Sánchez en la votación el día del debate de la investidura sería insuficiente.
De este modo, la CUP pone en un brete a Puigdemont y Comín quienes se verían obligados a renunciar a sus escaños si quisieran que Sánchez pudiera tener opciones, en caso de que el juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, accediese finalmente a que pudiera salir de prisión para acudir al Parlament.
Según el documento que la CUP presentó a sus bases, del que informaba esta mañana Antena 3, se sometieron tres opciones a votación: apoyar sin fisuras el acuerdo JxCAT-ERC; apoyarlo siempre que se aceptaran puntos programáticos para "materializar la república" catalana, o bien rechazarlo por su carácter "autonomista". Opción, esta última, que habría resultado vencedora.
'Espacio libre de Bruselas'
Por otro lado, la CUP explicaba en el texto a debatir que JxCAT y ERC pretenderían crear, bajo la denominación de 'Espacio libre de Bruselas, una suerte de estado paralelo.
En concreto, estarían trabajando para constituir en Bélgica una 'Asamblea de Representantes de la República', así como un 'Consejo de la República' que estaría presidido por Carles Puigdemont. Este sería el gobierno 'de facto' que daría directrices al Govern de la Generalitat presidido -si se dieran todas las circunstancias antes descritas- por Jordi Sánchez con "legalidad autonómica y obediencia republicana".
Asimismo, JxCAT habría barajado que este mismo lunes se pudiera realizar la presentación oficial de este 'Espacio libre de Bruselas' y que, de forma paralela, el president del Parlament, Roger Torrent, iniciase una nueva ronda de contactos con los grupos parlamentarios para designar un nuevo candidato al debate de investidura. Ahora, las estrategias y los tiempos podrían cambiar.