La Fiscalía de Madrid ha puesto punto final a la polémica por la denuncia de la Fundación Francisco Franco contra ‘El Intermedio’ por una serie de sketches humorísticos relacionados con la exhumación del dictador.
Las parodias de Franco están amparadas en la libertad de expresión y por tanto el asunto queda archivado.
Eso sí, si bien admite que no cabe un delito de odio por tratarse de un evidente espacio humorístico sin intención de promover hostilidad, humillación o violencia la Fiscalía se permite conceder que quizás los gags no fueran del todo afortunados o incluso posiblemente reprobables desde el punto de vista ético.