El presidente de Vox, Santiago Abascal, se apuntó un tanto en política internacional al ser recibido por el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, para sorpresa de todos.
Su visita a Israel no era conocida y ha sacudido el panorama político nacional, sobre todo desde el PP, ya que el encuentro se produce justo el día en que el Gobierno progresista aprobaba el reconocimiento del Estado de Palestina, cuando el partido de Feijóo sólo reaccionó mostrándose contrario por el momento, que consideraba "inoportuno" e "irresponsable".
Abascal ha impactado entre el electorado de derecha en plana campaña por las elecciones europeas y ha prometido a Netanyahu, dándole su palabra, de que si gobierna, apoyando al PP en un hipotético próximo gobierno nacional, revertirá el reconocimiento a Palestina que aprobó Pedro Sánchez y su Ejecutivo.
El líder de Vox explicó en redes sociales que había "transmitido" al mandatario israelí que "la investigación sobre la corrupción de Begoña Gómez es la verdadera causa de la decisión de Sánchez de reconocer al Estado palestino", asegurando que usaba este asunto como tapadera.
Lo más cuestionado ha sido la presencia de la bandera española en el encuentro, como si se tratara de una visita oficial de un representante político oficial de nuestro país.
Aplausos y halagos generalizados a Abascal
El hecho de haber sido recibido por Netanyahu y además justo en este instante tan significativo, le ha valido a Abascal multlitud de elogios desde la derecha, además de diversas instituciones pro-israelíes.
Por supuesto, también ha generado multitud de críticas
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