Los delincuentes contactan con mujeres a las que logran estafar haciéndose pasar por sus hijos para solicitarles de manera urgente una cantidad de dinero para hacer frente a un problema inmediato
Para perfeccionar el engaño alegan que no pueden comunicarse directamente con su teléfono habitual debido a supuestos problemas con su terminal y que no pueden recibir llamadas