En torno a las 9.15 horas de este jueves, el maquinista del tren Regional Express se percató de la presencia de una roca de grandes dimensiones junto a las vías de ferrocarril un kilómetro después de la estación de El Escorial y, ante la posibilidad de que el convoy no tuviera espacio para pasar, detuvo el motor.
Según informó uno de los pasajeros, el maquinista pidió la colaboración de varios pasajeros para apartar la piedra, que se había desprendido, al parecer a causa de la lluvia, y había llegado rodando hasta la vía. Ayudándose de varios listones de madera, y después de unos 30 minutos, los viajeros y el maquinista consiguieron apartar unos metros la roca para garantizar el paso del tren sin problemas.
El convoy, que tenía prevista la llegada a las 9.40 horas a la estación de Chamartín en Madrid, lo hizo finalmente a las 10.02 horas con 22 minutos de retraso. Según confirmó Adif, ningún otro tren se vio afectado por el bloqueo de la vía en sentido Madrid.