El presidente de la Cámara de Comercio de Madrid y de la Fundación Universidad-Empresa, Salvador Santos Campano, declaró este martes, en la clausura de la jornada “Universidad a la carta: universidades corporativas y universidades públicas”, que “la Universidad debe ser una fábrica de saberes, pero nunca una fábrica de parados”.
La Conferencia de Consejos Sociales de la Comunidad de Madrid organizó este encuentro con el objetivo de debatir sobre el aumento de la creaciónde centros de formación por parte de las propias empresas y facilitar los canales de colaboración entre las compañías y las universidades públicas. Junto a Santos Campano, participaron en este acto de clausura Carlos Mayor Oreja, presidente del Consejo Social de la Universidad Complutense de Madrid; Carlos Berzosa y Pedro González Trevijano, ambos rectores, respectivamente, de la Universidad Complutense de Madrid y de la del Rey Juan Carlos.
La presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, puso el broche final al acto, que tuvo como escenario la Biblioteca Marqués de Valdecilla (calle de Noviciado, 3). Por su parte, el presidente de la Cámara de Comercio defendió que, “sin renunciar a aspectos fundamentales”, las Universidades “deben estar en condiciones de adaptar sus planes de estudios a las necesidades de la sociedad, a la demanda de la fuerza empleadora” y recordó que “si ellas no lo hacen, serán las propias empresas las que traten de cubrir un vacío que puede perjudicar al progreso de la sociedad en su conjunto”.
En este sentido, Santos Campano explicó que “la formación no acaba en la Universidad”, ya que “los cursos de postgrado, los master en temas específicos y los programas de especialización juegan un papel fundamental en el objetivo de situar a los que se preparan en las mejores condiciones posibles a la hora de su incorporación a las empresas”.
El presidente de la Cámara de Comercio de Madrid también realizó un reconocimiento del “papel fundamental que, para la consecución de estos objetivos”, están jugando los Consejos Sociales, que actúan "como puente y lazo de unión entre las Universidades y las empresas” desde que los representantes empresariales se han incorporado a ellos.
“La formación es algo más que una preocupación, es un imperativo de nuestra razón de ser”, concluyó Santos Campano, en alusión a la intensa actividad que despliega la Cámara de Comercio de Madrid a través de la Fundación Universidad-Empresa (FUE) y del Instituto de Formación Empresarial (IFE). “Lo hacemos sin competir con la privada, que es una de las líneas estratégicas que hemos adoptado desde el actual equipo de gobierno de la Cámara”. “Nosotros no nos limitamos a desarrollar cursos específicos para graduados, sino que hemos demostrado saber tomar la iniciativa en proyectos y análisis sobre los puestos de trabajo que las empresas demandan y los que van a ser requeridos en el futuro inmediato”, añadió el Presidente.