Yo conocí a un jefe que cuando te llamaba a su despacho te decía casi siempre “te voy a dar malas noticias, pero excelentes explicaciones”.
Imagino que esta frase se ha oído en las pasadas horas en las sedes de más de un partido político y por supuesto en las del Partido Popular, donde el único resultado que valía era ganar.
Rajoy ha sido un referente alternativo a Zapatero y el apoyo que ha obtenido ha sido muy amplio, con lo que seria prudente que el ganador de las elecciones no echase en saco roto el hecho incuestionable de que hay un sector significativo de la sociedad que desea que no se gobierne contra media mitad de España, como ha ocurrido durante estos años.
Dicen que el pueblo es sabio y cuando hablan del pueblo yo no sé si se refieren a Lepe, Ciempozuelos o Lerma.
Lo único cierto es que, como diría El Gran Wyoming, “lo que el pueblo vota va a misa” y hoy ha ganado el PSOE con un apoyo más amplio que hace cuatro años, a pesar de haber bajado la participación.
¿Eso significa que Zapatero lo ha hecho bien durante estos cuatro años anteriores? Yo creo que no. Eso significa que la gente que ha votado prefiere a Zapatero que a Rajoy aunque el candidato socialista no lo haya hecho bien.
Lo importante sería que, como afirmó y no cumplió Felipe González, el candidato socialista dijera que “ha entendido el mensaje” y estos próximos cuatro años los experimentos los hiciese con gaseosa y no con la Constitución.
Un primer y necesariamente apresurado análisis de los resultados que a estas horas conocemos, nos lleva a decir que los electores quieren darle una segunda oportunidad a Zapatero, aunque han castigado a grupos más radicales y casi antisistema como son Ezquerra republicada de Cataluña e Izquierda Unida.
Si Zapatero no entiende el mensaje puede defraudar a quienes hoy le han votado, que no quieren un gobierno de más izquierda, como pedía el enterrador de IU Gaspar Llamazares, sino un mayor entendimiento en los grandes temas de Estado entre PSOE y PP.
Estas elecciones deberían servir para corregir errores, aunque yo que soy de natural desconfiado en estos temas, me malicio que no ocurrirá así y ZP volverá a las andadas.
Post data: Felicidades a Rosa Díez. Su escaño tendrá un valor ético especial en el Parlamento Nacional.