Lo que el lunes era desmentido por la Casa Blanca, ayer, al cierre de los mercados europeos, era anunciado por Trump: la suspensión temporal, durante 90 días, de los nuevos aranceles a la mayoría de sus socios comerciales, mientras simultáneamente eleva al 125% los aplicados a China. Apenas 24 horas después de su entrada en vigor, la Casa Blanca optó por congelar parcialmente las medidas, tras una fuerte caída bursátil y una fuerte subida en los rendimientos de los bonos del Tesoro. La reacción de los mercados fue inmediata, con fuertes subidas en la renta variable de Estados Unidos, que se ha extendido a los mercados asiáticos esta madrugada. Ahora habrá que esperar a la reacción de la Unión Europea después de que ayer anunciase aranceles del 25% a una serie de importaciones estadounidenses a partir del próximo martes.
Los activos estadounidenses están sufriendo las consecuencias de esta escalada en la guerra arancelaria, incluida la renta variable, el dólar y el mercado de renta fija. Ayer, el rendimiento del bono a 10 años alcanzaba el 4,515%, su nivel más alto desde el 20 de febrero y el de 30 años, el 5,023%, su cota más elevada desde noviembre de 2023. Hay temor de China pueda estar deshaciéndose de una gran parte de sus tenencias de bonos estadounidenses. China es el segundo mayor tenedor extranjero de deuda estadounidense. En enero poseía 761.000 millones de dólares en bonos del Tesoro. Japón es el mayor tenedor, con 1,08 billones de dólares.