Donald Trump se estrenó esta legislatura con un discurso en el Congreso de EEUU, donde habló de sus grandes planes para el segundo mandato.
El acto reunió a ambas cámaras legislativas: el Senado y la Cámara de Representantes. Allí, el republicano fue recibido con una ovación mientras avanzaba por el pasillo central, saludando a quienes le tendían la mano.
Ya en el turno de palabra, Trump destacó el regreso de la fuerza estadounidense en múltiples ámbitos: "Esta noche vengo aquí para comunicar que el sueño americano no solo resurge, sino que lo hace más grande y mejor que nunca". Según él, este impulso es "irreversible", reflejando la fortaleza recuperada desde su victoria electoral.
Aranceles
Trump presumió de política de aranceles, que ayer mismo entraban en vigor para las vecinas México y Canadá y la rival China. Pocos minutos después provocaba el caos en los mercados bursátiles, con los grandes índices desplomándose ante un panorama incierto que viene en los próximos tiempos.
El mandatario aprovechó la ocasión para celebrar los resultados obtenidos en las elecciones del 5 de noviembre, describiéndolos como "impresionantes, algo que no se veía en décadas". Esta afirmación provocó abucheos entre la bancada demócrata, desencadenando uno de los momentos más tensos de la noche cuando Al Green, representante demócrata de 78 años, se levantó para protestar moviendo su bastón.
Los republicanos respondieron con cánticos de "USA", ahogando así la intervención del legislador, quien terminó siendo expulsado tras varias advertencias del presidente de la Cámara, Mike Johnson.
Trans e inmigrantes
Más tarde, Trump inició una enumeración de las órdenes ejecutivas firmadas desde su regreso al poder. Cada anuncio fue acompañado por una oleada de aplausos que mantuvo a los republicanos de pie, incluidos Mike Johnson y el vicepresidente JD Vance, ubicados detrás del estrado. Entre estas decisiones, Trump mostró especial orgullo por 2 medidas: "Hemos eliminado a los hombres de las competiciones deportivas femeninas" y adoptado acciones para "detener la entrada masiva de inmigrantes ilegales". En este sentido, añadió: "Nuestro país ya no es 'woke'".
"Hace tan solo dos semanas anuncié el comienzo de una nueva era dorada para Estados Unidos. Desde entonces, hemos implementado políticas rápidas y efectivas. En apenas 43 días hemos logrado más que muchos gobiernos en 4 u 8 años. Y esto es solo el principio", declaró Trump, marcando así el tono triunfalista de su intervención.
Durante su discurso, el presidente también destacó que sus casi 100 órdenes ejecutivas buscan consolidar un cambio profundo en la gestión interna y externa del país. Su mensaje buscaba reforzar la percepción de un gobierno decidido a actuar con rapidez y eficiencia frente a los desafíos actuales.
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