El escándalo de Íñigo Errejón y sus presuntos malos tratos y agresiones sexuales siguen dando qué hablar. La actriz Elisa Mouliaá, que fue la primera en salir del anonimato tras el estallido del caso, ha interpuesto ya una denuncia en comisaría.
La joven presentadora y actriz compartió en redes sociales que ella había sufrido acoso sexual por parte del político y quería denunciarlo después de la dimisión del de Más País y de que saliesen a la luz testimonios anónimos que apuntaban a conductas machistas.
Unas conductas que empezaron a sonar hace un año, pues entonces una joven denunció "tocamientos" en un concierto por parte del político, pero aquel post en redes quedó en el olvido. Hasta ahora.
Por la tarde ella misma confirmó que acudía a la comisaría y que la denuncia se haría pública más adelante.
Ya se conoce parte del contenido de la querella y los hechos denunciados por Mouliaá ocurrieron en 2021 durante una fiesta de un amigo de la joven.
"Se sintió paralizada"
Mouliaá ha subrayado en todo momento que tiene pruebas que ha aportado a la denuncia. Según ha adelantado la 'SER', que ha accedido al texto de la querella, Errejón le "empujó contra la cama" y se "sacó su miembro viril" sin contar en ningún momento con el consentimiento de Elisa.
Ha explicado a los agentes que el encuentro se produjo tras llevar alrededor de un año hablando en redes sociales con Íñigo Errejón y él le invitó a la presentación de su libro. Posteriormente accedió a tomar algo con él y por "cortesía" le invitó a una fiesta de unos amigos, a lo que él accedió.
Y es ya en el coche para acudir a la fiesta donde comienza la mala actitud del político.
"Una vez en el interior del coche, Íñigo cambia de actitud y torna en una actitud dominante indicando a la dicente que le iba a imponer tres reglas: La primera que no se alejase mucho de él esa noche, la segunda que si lo hacía no se fuese a más de veinte metros de él y regresase en un minuto y la tercera que esa noche le diese un beso. La declarante se sintió violentada y cortada si bien decidió guardar silencio por ser quien era", reza la denuncia.
Justo antes de entrar a la fiesta, en el ascensor, Errejón le "besó" "de una forma violenta". Más adelante, ya en la fiesta, Mouliaá ha explicado que al ponerse a bailar con un amigo, el de Más País le "agarró" y se la llevó a una habitación por lo que ella cree que fue un "ataque de celos".
Comenzó la presunta agresión
"Una vez en el interior, el denunciado cerró con pestillo la puerta, para impedir que la dicente pudiese escapar comenzando a besar y a tocar a la dicente por distintas partes de su cuerpo, sobre todo la zona de los pechos y de los glúteos no pudiendo concretar si fue por encima o por debajo de la ropa, aunque recuerda que le llegó a quitar el sujetador al tiempo que le decía frases lascivas del tipo "CÓMO ME PONES", todos estos hechos ocurrieron sin el consentimiento de la declarante. Acto seguido empujó a la dicente sobre la cama y el denunciado se sacó su miembro viril, comenzando a lamer la zona de los pechos de la declarante", detalla la denuncia.
La presentadora "se sintió paralizada y asegura que "no consintió nada de lo que sucedió, fue en ese momento cuando le dijo que ella quería seguir en la fiesta, argumentando que su amigo se había quedado solo. Íñigo le respondió que salía de la habitación con la condición de que en veinte minutos ambos se tenían que ir de la fiesta a la casa de Íñigo, ya que tenía intención de llamar a un vehículo".
Actitud fría y sin empatía
La joven señala que accedió para poder salir de allí y pusieron rumbo a casa del diputado: "A mitad de camino de casa del denunciado recibe la declarante una llamada telefónica de su padre en la que le decía que su hija de un año de edad en ese momento, tenía 40º de fiebre, extremo que preocupó mucho a la diciente pero no a su acompañante, el cual no reaccionó en absoluto. Iñigo mantenía una actitud fría e impasible a lo que estaba sucediendo no interesándose de ningún modo en el estado en el que se encontraba su hija pequeña, no llegando ni a ofrecerle la posibilidad de trasladarla hasta el domicilio de sus padres".
Una actitud que, según se lee, ella no comprendía y todo empeoró cuando él, "sin mediar palabra" comenzó a besarla y a realizarla "tocamientos".
"Se estaba sintiendo muy incómoda y que además seguía preocupada por su hija, todo le sucedía estaba pareciendo muy violento por lo que finalmente le terminó diciendo Iñigo "SÓLO SI ES SI, PARECE MENTIRA QUE ME ESTÉ PASANDO ESTO CONTIGO".
Según el texto de la denuncia, él le dio las gracias y le señaló que sus palabras le servirían para "futuros encuentros".
A la pregunta de la Policía sobre si se sentía víctima de un delito sexual, Mouliaá ha respondido que sí.
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