Ayer, dos altos funcionarios de la Reserva Federal dijeron que aún no están listos para decir que las tendencias inflacionarias están regresando de manera sostenible al objetivo del 2% del banco central, después de que los datos de la semana pasada mostraran un bienvenido alivio en las presiones sobre los precios al consumidor. Por un lado, el vicepresidente de la Junta de Gobernadores de la Reserva Federal en una conferencia en la Asociación de Banqueros Hipotecarios en Nueva York señaló que es demasiado pronto para decir si la reciente desaceleración del proceso desinflacionario será duradera. El funcionario, que describió la política monetaria actual como restrictiva, se negó a decir si esperaba que los recortes de tipos comenzaran este año y en cambio señaló, al igual que sus colegas, que evaluará cuidadosamente los datos económicos entrantes, las perspectivas y el equilibrio de riesgos.
Por otro lado, en una conferencia celebrada por la Reserva Federal de Atlanta, el vicepresidente de supervisión de la institución monetaria dijo que las lecturas de inflación en el primer trimestre de este año fueron decepcionantes. “Estos resultados no me proporcionaron la mayor confianza que esperaba encontrar para apoyar la flexibilización de la política monetaria", añadiendo que la Reserva Federal necesitará darle más tiempo a la política restrictiva para continuar su trabajo. Se refuerza así el mensaje general de la Reserva Federal de que los recortes de tipos esperados por los mercados están en suspenso hasta que esté claro que la inflación volverá al objetivo del 2%.