Al menos cuatro personas han muerto en el atentado que este martes se produjo en una carretera costera de Beirut, y que con casi total seguridad iba dirigido contra intereses norteamericanos, según dijeron a Efe fuentes policiales.
"Con un noventa por ciento de probabilidad, el atentado iba dirigido contra un coche de la embajada de Estados Unidos" en la capital libanesa, dijeron las fuentes.
La portavoz de la embajada estadounidense en Beirut, Cherie Lanzel, dijo a Efe que no hay ciudadanos de EEUU entre las víctimas del atentado. Al parecer, los muertos no son los ocupantes del coche diplomático, sino los que viajaban en otro vehículo que venía detrás.
Por su parte, el portavoz del Departamento norteamericano de Estado, Sean McCormack, confirmó este martes que un empleado local de la embajada de EEUU en Beirut resultó herido.
En el automóvil contra el que se dirigió el ataque viajaban dos empleados locales - el conductor, que sufrió heridas leves, y un ocupante, que se encuentra ileso-, según dijo el portavoz.
En el momento del ataque no viajaba en el coche ningún ciudadano o diplomático estadounidense, añadió McCormack.
El portavoz no pudo ofrecer muchos detalles sobre el atentado, y no especificó si, como se cree, los cuatro fallecidos viajaban en un vehículo que marchaba detrás del coche de la embajada.
"Lo que sabemos hasta ahora es que han muerto cuatro ciudadanos que vivían en Beirut, y que no trabajaban para la embajada", dijo.
La cadena televisión LBC, la primera en llegar al lugar de los hechos, mostró a varios guardias de la embajada norteamericana corriendo nerviosos hacia el sitio del atentado.
Según la cadena, hay además "más de veinte heridos", mientras que una veintena de coches quedaron seriamente dañados, algunos completamente calcinados.
La explosión se registró en la carretera costera que conduce al norte del país, concretamente en la zona conocida como Burch Hamud, un barrio de mayoría armenia (cristiana).
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